Atender a los ‘sin papeles’ costó 244 millones
El Sistema Nacional de Salud sigue atendiendo a los inmigrantes ilegales que viven en España, pero el Gobierno no extenderá los derechos que supone entregar una tarjeta sanitaria a este grupo de población. Y es que existe el riesgo de que esta decisión, que defienden las comunidades gobernadas por el PSOE, se convierta en un cheque sin fondos con efecto llamada. El secretario general de Sanidad, Rubén Moreno, ya adelantó a ‘el-Economista’ que se han atendido 185.000 extranjeros en situación irregular, con un coste para las arcas públicas de 244 millones de euros al año. Sanidad no derogará el Real Decreto-ley 16/2012, que reformó el anterior modelo de cobertura universal en un sistema de aseguramiento, ya que se ha evitado el turismo sanitario y un gasto anual de 1.000 millones de euros, según Moreno. El Gobierno sí está abierto, en cambio, a ampliar los derechos de esta población, a los que se daría un documento -nunca una tarjeta sanitaria- que les daría derecho a ser atendidos a través de los servicios de prestación social en la comunidad que se lo facilitara y cuya validez sería de un año, aunque renovable. Moreno ha avisado a las comunidades autónomas que si dan una tarjeta sanitaria a los inmigrantes ‘sin papeles’ también se la tienen que extender a los ciudadanos de otros países europeos para evitar que Bruselas abre un expediente a España. De esta forma, se volvería al turismo sanitario que “tantos problemas” generó a España.