Las nuevas tecnologías reducirán el tiempo de espera
Es evidente el rápido desarrollo tecnológico que hemos experimentado en los últimos años y cómo se ha integrado en nuestra vida cotidiana, haciéndose imprescindible para nosotros. A lo largo de un día utilizamos dispositivos tecnológicos que facilitan nuestras decisiones y actividades diarias, y este hecho, también se ha trasladado al plano profesional y en concreto, al ámbito sanitario.
En los últimos 20 años, hemos visto cómo se automatizaban la mayoría de nuestras actividades, lo que nos llevaba horas, ahora lo podemos realizar en tan sólo unos minutos, gracias al avance tecnológico e innovación, el procesamiento de datos se realiza de una manera fácil y rápida. La adopción de las nuevas tecnologías en el área sanitaria ha permitido simplificar numerosas tareas y sobre todo, mejorar la calidad asistencial del paciente y su calidad de vida.
Aunque la implantación de las nuevas tecnologías en medicina sólo acaba de comenzar, ya existen una gran cantidad de aplicaciones y dispositivos móviles que han comenzado a cambiar la relación entre médico-paciente, así como la del paciente con su enfermedad. En la actualidad, los pacientes pueden ser educados en su patología desde el inicio, como hacen actualmente las técnicas de gaming, las cuales enseñan a los niños acerca de su enfermedad, mostrándoles cómo identificar los síntomas, dolencias, saber cuándo deben tomarse la medicación, efectos que les produce, etc.
El avance tecnológico hará que concibamos la medicina de una forma completamente diferente a la que mantenemos ahora. Por un lado, la tecnología facilita el acceso y amplía la información generada durante la consulta médica, por lo que los especialistas podemos mejorar el seguimiento y monitorización de los pacientes, ayudando a establecer un diagnóstico y tratamiento adecuados. Por otro, los pacientes pueden adoptar un papel más activo en el conocimiento y control de su enfermedad. El avance tecnológico hará que concibamos la medicina de una forma completamente diferente a lo que entendemos ahora.
Durante uno de los talleres organizados por Pfizer en el último Congreso de la Sociedad Española de Reumatología (SER), tuve la oportunidad de realizar algunas demostraciones del potencial uso que podrían tener en un futuro innovaciones tecnológicas como la realidad virtual (RV) en 3D o la tecnología portable, que todavía se encuentran en fases muy incipientes de investigación.
En el caso de los dispositivos portable, nos permitirían ir un paso más allá de las actuales aplicaciones para Smartphone, combinando la adquisición de información de forma pasiva, además de la forma activa que actualmente existe. A través de esta tecnología, el reumatólogo recibirá de forma instantánea la información del estado de su paciente y tendrá acceso a su historial médico haciendo posible una mejor monitorización activa y pasiva de los pacientes.
De este modo, sabremos cómo se encuentra el paciente en cada momento, podremos comunicarnos con él cuando sea necesario, reduciendo las visitas utilizando la consulta sólo cuando esta sea realmente necesaria, y haciendo los ajustes de tratamiento oportunos de manera más rápida y eficiente. Además, la relación entre médico y paciente se seguirá modificando y ésta se entenderá de una forma puesto que la interacción entre ambos será mucho más fluida.
Otra de las novedades tecnológicas que presentamos, fue la realidad virtual 3D acercando los beneficios que esta tecnología traerá para todos los profesionales sanitarios a la hora de asistir a diferentes formaciones. Las barreras del espacio-tiempo serán traspasadas gracias al uso de dos dispositivos: unas gafas especiales y un smartphone, con los que cualquier especialista podrá asistir a cursos impartidos a miles de kilómetros, pero teniendo la sensación de estar realmente presente allí. La realidad virtual 3D sumergirá a cada persona en un espacio que representa el mundo real existente en otro lugar, donde tendrán una visión de 360 grados y una fiel reproducción de los relieves.
Los últimos avances tecnológicos aplicados al área de la Reumatología están orientados al desarrollo de aplicaciones multiplataforma específicas destinadas a smartphones, así como el desarrollo de la conectividad a través de las redes sociales y la computación en la nube (cloud computing).
En la actualidad, la mayoría de los sistemas con los que contamos son de tipo administrativo, los cuales nos permiten simplificar tareas rutinarias y ahorrar tiempo. Aunque ya existen modelos de historia clínica electrónica y de sistemas de recogida de datos clínicos, todavía nos encontramos en una fase muy inicial de tecnología aplicada a la medicina ya que los sistemas actuales, aún están lejos de aportar la funcionalidad que necesitamos para optimizar nuestra labor clínica.
Para que lleguemos a alcanzar una implantación masiva de esta tecnología en todos los centros, debemos crear herramientas específicas que permitan el uso masivo de tecnologías como la realidad virtual o los dispositivos portables, como ha ocurrido con los móviles, por ejemplo.
Esto son sólo meros ejemplos de los beneficios que podría traer consigo la apuesta por la innovación y el uso de nuevas técnicas pero estoy convencido de que los dispositivos portables, el gaming, la programación o computación cognitiva, la inteligencia artificial y el Internet de las Cosas - control mediante sistemas de información de nuestros utensilios diarios-, nos seguirán avanzando para facilitar la recogida de información sobre nuestros pacientes, su estado actual y el seguimiento diario de la evolución de la enfermedad, así como el análisis rápido y preciso de dichos datos. Como resultado podremos tomar decisiones basándonos en la información a tiempo real. Será muy interesante ver y adaptarse a los nuevos tiempos, ya que esto no ha hecho más que empezar.