Avanzamos hacia el futuro siendo parte de la solución
El sector sanitario privado a lo largo del último año ha tenido un comportamiento positivo en términos de desarrollo y crecimiento, tendencia esta que sin duda se verá confirmada una vez que el consumo interno se reactive
El sector sanitario privado a lo largo del último año ha tenido un comportamiento positivo en términos de desarrollo y crecimiento, tendencia esta que sin duda se verá confirmada en los próximos ejercicios una vez que el consumo interno parece que se va reactivando y la crisis económica va remitiendo en nuestro entorno según apuntan todos los organismos, instituciones y expertos -el PIB per cápita de España se triplicará en los próximos 35 años según aseguran los analistas de The Economist Intelligence Unit-.
En España el sector de la sanidad privada supone el 28,3 por ciento del gasto sanitario total quedando por encima de otros países industrializados de la UE como Alemania (23,29 por ciento) o el Reino Unido (16,03 por ciento). A pesar de la crisis, el sector asegurador ha logrado mantener cifras de crecimiento significativas, de tal forma que el seguro de salud se consolida como una necesidad para un porcentaje cada vez más elevado de la población -en 2014, el volumen de primas se incrementó un 3,44 por ciento, alcanzando los 7.175 millones según datos de Unespa-. En cualquier caso y a pesar de que las cifras hablan por sí solas, uno de los aspectos más relevantes para nosotros es la satisfacción de nuestros pacientes y sus familias. En este sentido me gustaría enfatizar los resultados del último barómetro presentado recientemente en el que el 86 por ciento de los usuarios se decanta por recomendar el uso de la sanidad privada a sus familiares y amigos, manteniéndose los índices de satisfacción general con puntuaciones por encima del notable.
Si hablamos de resultados de salud expuestos a través del estudio Resa encontramos valores muy favorables y positivos en todos los indicadores analizados respecto a las recomendaciones internacionales más exigentes de buena praxis y en cuanto a los datos de resolución asistencial es importante destacar que la sanidad privada es muy resolutiva, presenta tasas de retorno a urgencias y reingresos comparables con las de los mejores sistemas sanitarios del mundo. El futuro lo vemos con optimismo y a la vez somos conscientes de las dificultades que nos circundan. La principal reside en la progresiva politización de la Sanidad y sus consecuencias, un hecho que en nada beneficia al sistema en su conjunto. Todos los profesionales intentamos dirigir el barco de la sanidad a buen puerto, el de la sostenibilidad y la solvencia con la mirada atenta a quien merece todo nuestro esfuerzo, atención y cuidados, el propio paciente.