Esofagitis eosinofílica: una patología en crecimiento
La esofagitis eosinofílica -EoE, por sus siglas en inglés- es una forma particular de alergia alimentaria crónica caracterizada por la inflamación de este órgano tras el contacto con alérgenos de la dieta. La EoE surgió por vez primera en la década de 1980 y fue definida como una enfermedad diferenciada de otras esofagitis en 1993. Desde entonces el número de casos ha aumentado constantemente, hasta constituir en la actualidad la principal causa de dificultad para tragar y de atragantamientos repetidos en menores de 50 años, incluidos niños. La EoE impacta negativamente en la calidad de vida de los pacientes y genera grandes costes para los sistemas sanitarios. La expansión de la EoE es más acusada en países occidentales, habiéndose relacionado con el aumento generalizado de otras de enfermedades inmunológicas, sin que hasta la fecha se hayan descubierto las razones de su origen y expansión.
Leche, trigo y huevos, tres alimentos presentes en la dieta de los humanos desde hace milenios, son los principales causantes de EoE; otros alimentos se implican con menor frecuencia. Evitar su consumo permitiría controlar la enfermedad, pero este tratamiento dietético no es sencillo en la mayoría de los casos. Para empezar, las pruebas de alergia habituales no identifican qué causa la enfermedad en cada paciente particular, por lo que deben emplearse endoscopias con biopsias repetidas que verifiquen la remisión de la inflamación al restringir ciertos alimentos, y su reaparición al reintroducirlos. Muchos pacientes tendrán dos o más alimentos independientes como causa de sus síntomas, dificultando así su dieta. Finalmente, el consumo de alimentos procesados que incluyen en su composición las principales causas de EoE limita también el tratamiento dietético. Por este motivo, se han empleado fármacos para tratar la EoE desde sus primeros casos, siendo los corticoides tópicos usados en el asma y en otras alergias los más eficaces y seguros. Sin embargo, hasta muy recientemente no disponíamos de medicamentos específicamente desarrollados para la EoE, y los pacientes eran tratados con formulaciones en inhalador, empleadas fuera de ficha técnica e incapaces de asegurar la correcta cobertura del esófago. La Agencia Europea del Medicamento acaba de aprobar Jorveza®, el primer fármaco desarrollado específicamente para ofrecer una alternativa eficaz a muchos pacientes con EoE. A pesar de los avances en su tratamiento, la EoE representa un problema de salud en expansión que precisa de un decido esfuerzo en la investigación de sus causas para después diseñar estrategias preventivas.