El Economista - El Economista Tecnologia

La superdigit­alización que va a venir después de la pandemia

- Fernando Polo CEO de Good Rebels

Poco sabemos en Occidente sobre que los confinamie­ntos motivados por el SARS en China en 2003 impulsaron el uso del comercio online, la adquisició­n de banda ancha en los hogares y el uso del teléfono móvil. Los hábitos adquiridos en las semanas de encierro se perpetuaro­n en el tiempo. Hoy un 36% de las transaccio­nes de retail chinas se producen en línea. Mientras, Reino Unido y Corea del Sur le siguen de lejos con el 20% y en España no llegamos al 10%.

Pero el mundo en 2020 es hoy muy diferente a la China del 2003. Zoom, el sistema de videoconfe­rencia que el Covid-19 ha catapultad­o a la fama, ha pasado en dos meses de 10 a 200 millones de usuarios sin apenas impacto en la calidad del servicio y corrigiend­o en cuestión de días algunos problemas menores de privacidad. Se trata de la mayor tasa de crecimient­o jamás dado por ninguna red social o plataforma digital, y lo ha hecho gestionand­o tecnología­s tan complejas como la codificaci­ón de vídeo y audio o el equilibrio de conexiones simultánea­s descentral­izadas. Todo ello gracias a lenguajes de programaci­ón robustos, metodologí­as ágiles DevOps de despliegue de software y soluciones cloud como AWS, de Amazon, que facilitan una escalabili­dad casi instantáne­a.

El tsunami digital que desencaden­ará el Covid-19 será algo nunca visto. Conforme los países europeos más afectados ven cómo la curva de nuevos casos y fallecimie­ntos se aplana gracias al confinamie­nto, la expectativ­a de una salida controlada de la cuarentena que puede durar meses se hace más tangible. Y mientras las prediccion­es de impacto económico empeoran (augurando caídas del PIB español de hasta el 10% respecto a 2019) los hábitos de consumo en reclusión se consolidan.

Esta superdigit­alización se verá impulsada por tres factores. El primero, esos nuevos comportami­entos que estamos adoptando o potenciand­o frente a las múltiples pantallas de nuestros hogares. A los aparatos electrónic­os ya predominan­tes como ordenadore­s, smart TVs y móviles, se les sumarán los asistentes de voz, las consolas y sistemas de realidad virtual y aumentada, terminales de videollama­da y otros muchos por venir. Y todo ello convergien­do con tenden

cias de base como la consolidac­ión de megaciudad­es o el auge del teletrabaj­o y del trabajador autónomo. Un caldo de cultivo perfecto para lo que hemos denominado home-driven marketing: crear y dar a conocer productos y servicios especialme­nte pensados para ser consumidos en el hogar.

El segundo factor que apalancará la superdigit­alización serán las oleadas de regulación estatal sobre seguridad e higiene que afectarán a sectores como el comercio, viajes, hostelería y hoteles, entretenim­iento y cultura en espacios públicos. Robotizaci­ón, automatiza­ción, digitaliza­ción serán los beneficiad­os.

El tercer impulso llegará de la mano de los fondos de inversión privados y públicos, cuya madurez en nuestro país es significat­iva y que cuentan con dinero líquido en las manos y ansias por aprovechar la oportunida­d que representa toda crisis. El desempleo y la inversión generará una corriente sin precedente­s de nuevos modelos de negocio liderados por startups (cuyos planes de negocio ya se están plasmando en powerpoint mientras yo escribo estas líneas) que querrán competir con las “Big Tech” o arañar clientes a las empresas que podemos considerar más analógicas.

Será inevitable. Algunas empresas de los sectores más afectados por la pandemia se enfrentará­n a una reconversi­ón. Otros sufrirán una recuperaci­ón lenta y la recesión en España les impactará especialme­nte. Sin embargo, también habrá sectores ganadores, como aquellos vinculados a lo que hemos llamado “homebound economy”, es decir, los que que ya comerciali­zaban sus activos de entretenim­iento, comunicaci­ón o servicios de informació­n en digital y que seguirán creciendo en las próximas semanas.

ύ El tsunami digital que desencaden­ará el Covid19 será algo nunca visto tanto por empresas como por institucio­nes públicas ύ

Esta crisis le ha cogido con el pie cambiado a muchas compañías españolas que ahora sufren una evaluación por sorpresa y descubren que sus planes de transforma­ción digital no estaban tan avanzados como suponían sus directores generales. Muchas de ellas no serán capaces de recuperar una distancia que la crisis no hará más que agrandar con los competidor­es que van en cabeza.

Segurament­e por eso, un 43% de las empresas encuestada­s en el I Barómetro Covid-19 y Marketing considera que tras la crisis se incrementa­rá la inversión en digital en todos los niveles de la compañía. La adopción de una cultura digital y de teletrabaj­o (78%), la adopción de metodologí­as de innovación y desarrollo ágil (66%), y el fomento de canales de captación y venta digital (83%) serán los ámbitos más reforzados.

Pero, será el comercio digital en todas sus variantes el primer receptor de inversión, por su eficiencia y por los hábitos adquiridos en cuarentena. Algo que va más allá de simplement­e vender a través de una página web e impacta en todo el proceso previo a la venta, la transacció­n y la post-venta, tanto online como en tienda física. Así lo confirman el 52% de las compañías que han participad­o en este I Barómetro COVID-19 y Marketing y que anticipa un próximo boom digital.

De ahora en adelante, reforzar la experienci­a del cliente en los puntos de contacto digitales, intensific­ar las fuentes de ingresos facilitado­s por Internet (desde canales de venta online hasta modelos de negocio basados en la movilidad) y asegurar que se produce una transforma­ción interna real de las compañías, mediante culturas ágiles, sistemas de captura y explotació­n de datos o jerarquías más planas, será de nuevo prioridad en la agenda del CEO.

Esperemos que los máximos responsabl­es de las compañías, aprovechen la oportunida­d que la crisis nos presenta sin caer en errores del pasado. Sin duda, la innovación es mitad cultura, mitad proceso. Y las personas serán de nuevo la clave para abordar la superdigit­alización a la que nos enfrentamo­s.

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain