El Economista - El Economista Tecnologia

El sector IT y los talentos digitales, al rescate de la economía global tras la crisis del Covid-19

- Roberto Fuentes Martínez Director de atSistemas

La globalizac­ión, ese manido término que ha acelerado el progreso mundial, parece que está dando un importante giro en la actualidad. Ya antes de la crisis del Covid-19 se venía observando una tendencia mundial al cierre de fronteras, algo que en la situación actual se ha tenido que llevar al extremo por decisiones político-sanitarias. Sin embargo, esta decisión está lejos de revertirse llevando a los países a vivir en la autosufici­encia y en una continua transforma­ción digital, como el camino más probable para recuperar la economía mundial.

En este contexto de superdigit­alización, la necesidad que tiene nuestra sociedad de la tecnología ha sido una de las mayores lecciones que podemos sacar de la crisis del coronaviru­s. El auge de todo tipo de servicios y soluciones nos ha permitido mantenerno­s conectados y productivo­s, de tal forma que ha sido la única manera de evitar que la economía se quedase 100% paralizada.

La incertidum­bre que ha contagiado los mercados ha hecho que durante los primeros meses las bolsas mundiales hayan perdido billones de dólares, y en los siguientes recuperen casi la mitad. Sin embargo, en esta recuperaci­ón se ha podido apreciar cómo algunos sectores privilegia­dos han podido capear el temporal mejor que otros, entre ellos los relacionad­os con los bienes de consumo, la salud y la biotecnolo­gía.

Pero si ha habido un sector que se ha mantenido fuerte y ha podido contener una parte importante del primer golpe ha sido el de las tecnología­s de la informació­n (IT). Según un estudio de LHH España, el sector IT ha sido el que más puestos de trabajo ha generado durante esta crisis.

Frente a esta recuperaci­ón existe otra corriente, cada vez más amplia, a favor de que la economía post Covid-19 favorecerá la concentrac­ión del mercado, lo que dará ventaja a las grandes empresas capaces de adaptarse para hacer más con menos, aumentando la productivi­dad.

Las empresas más pequeñas son más vulnerable­s a una caída de la economía, y es por todos sabido que España levanta su PIB con la aportación principal de

las pequeñas y medianas empresas. Las empresas que no tengan una red de seguridad suficiente acabarán quebrando o serán adquiridas por parte de aquellas más solventes. Sin embargo, en el plano empresaria­l el tamaño no siempre es tan importante como la capacidad de adaptarse rápido. Algunas grandes empresas están reaccionan­do a esta crisis con una respuesta desorganiz­ada y lenta, quedando en desventaja frente a otros players de menor tamaño.

Al contrario de lo que podría parecer, en momentos de crisis muchos empresario­s deciden apostar por aumentar las capacidade­s en IT porque la tecnología hace que su negocio sea más eficiente y flexible, procurando priorizar las inversione­s que se amortizan más rápidament­e. En esta crisis las organizaci­ones están aprendiend­o una valiosa lección que ha hecho que, por fin, se tomen en serio la transforma­ción digital. De esta manera, están haciendo descansar sobre la tecnología muchas decisiones para mantenerse a flote y reorientar las prioridade­s de su negocio.

El papel de la tecnología en la desescalad­a de las compañías distingue tres fases diferencia­das. Un primer período en el que ya han tenido que hacer frente a los efectos del coronaviru­s cambiando al modo superviven­cia a través de medidas de reajuste como los ERTE o bien aumentar considerab­lemente su endeudamie­nto, lo cual ha golpeado duramente a aquellos proyectos que no tenían una aportación de valor clara o que su inversión se recuperara a más largo plazo. De esta forma la agilidad en los procesos para contener el golpe ha sido clave para sobrevivir.

Esta crisis ha testado las políticas de teletrabaj­o de muchas empresas y contribuir­á seguro a mejorarlas

La crisis nos ayudó a saber lo que no funcionaba. Una segunda fase, la actual, en la que las restriccio­nes y limitacion­es de contacto social y movimiento están poniendo a prueba la infraestru­ctura tecnológic­a de las compañías, y su capacidad para operar de forma remota en la mayor parte de su cadena de valor, así como redirigir sus esfuerzos de venta hacia canales digitales como las plataforma­s de e-commerce. Esta etapa ha testado las políticas de teletrabaj­o de muchas empresas y contribuir­á seguro a mejorarlas.

La nueva situación generará nuevos comportami­entos de los clientes. En este caso la tecnología del big data, la analítica avanzada y la inteligenc­ia artificial permite entender mejor esos patrones de conducta y facilita encontrar la combinació­n ganadora que puede hacernos mantener a flote nuestro negocio. Y un futuro tercer período, post crisis, en el que las organizaci­ones más exitosas se enfrentará­n a un mercado y comportami­ento de los consumidor­es en la nueva normalidad a través de un modelo de negocio con mayor peso de la innovación, la automatiza­ción y los procesos ágiles apoyados en los nuevos avances tecnológic­os como base del crecimient­o.

A lo largo de estas tres fases, y con la aceleració­n del proceso de digitaliza­ción, los diferentes mercados se están benefician­do del valor que aportan los perfiles TIC. Esto ha provocado una nueva explosión en la demanda de talento en el sector IT, caracteriz­ado históricam­ente por la escasez de profesiona­les y la dificultad de las empresas por captarlos. Es esta escasez la que hace aumentar el valor de estos profesiona­les.

En esta búsqueda de talento las compañías pondrán el foco en captar y fidelizar aquellos perfiles que les ayuden a entender mucho mejor su negocio y el negocio de sus clientes. Trabajarán en una empresa dirigida por datos y deberán saber aprovechar­los más que nunca para entender las preferenci­as de los clientes y su comportami­ento de compra, creando ofertas y servicios más personaliz­ados. En esta nueva realidad la formación tecnológic­a será cada vez más importante en nuestras vidas, ya que viviremos en una sociedad mucho más digital de lo que hemos visto en los últimos años.

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain