Un Jerez más gourmet para captar el mercado nacional y capear el ‘Brexit’
Este vino ha encontrado en la gastronomía la forma de convencer al mercado nacional y lidiar con la salida del Reino Unido
El jerez forma parte del Foro de Denominaciones de Origen Vitivinícolas Históricas. La Ruta del Vino y el Brandy del Mar-co fue la más visitada en España en 2018. Y el jerez Harveys es la única marca española en la lista de la compra de la reina de Inglaterra. Sin embargo, este vino parece que ha perdido fuelle en el terreno nacional, fruto de su esencia exportadora y algún error del pasado. La apuesta por la gastronomía y la alta gama es la estrategia de Jerez para superar el Brexit y recaptar al público nacional más allá de Andalucía.
César Saldaña, director del Consejo Regulador de Jerez, explica en una entrevista que la mayor preocupación respecto al Brexit es la incertidumbre, el no saber lo que va a pasar. “Todos los operadores de la cadena están preocupados, incluso el propio consumidor inglés que comienza a estar retraído en compras”. Y es que los productores de la denominación de origen se juegan mucho: el pasado año, las exportaciones a Reino Unido supusieron el 28 por ciento de las ventas totales, con 8,4 millones de litros exportados.
Un Jerez de alta gama
Sin embargo, Saldaña respira con cierta tranquilidad respecto a una hipotética subida de aranceles, ya sea por el Brexit o por la guerra comercial, porque desde el Consejo Regulador creen firmemente que su producto debe encaminarse al sector de alta gama y encauzarse en la revolución gastronómica. “Los vinos de Jerez se están enfocando a productos de gama alta, que generan más valor, y no tanto a productos de volumen masivo”. Un ejemplo claro de esta tendencia son mercados como el norteamericano o el ruso. Este posicionamiento en el sector
premium es el que va a permitir a las bodegas de Marco de Jerez, explica Saldaña, disminuir los daños ante un posible Brexit, pero también es el camino para recuperar la notoriedad perdida en el mercado nacional. Mientras otras denominaciones de origen como Ribeiro o Rías Baixas han ganando terreno, subidos a la ola de la revolución gastronómica, frente al Rioja o Ribera del Duero, los vinos de Jerez se han quedado circunscritos al Marco y al extranjero.
En conversaciones con diferentes bodegueros, asumen que los puntos oscuros de la historia del vino de Jerez en España han pesado mucho. Si a finales de los años setenta, la nueva cocina vasca sentaba las bases de la Nouvelle Cuisine española, a comienzos de los ochenta, el vino de Jerez estaba enfocado en el volumen más que en la calidad. Una mala estrategia que desmereció la marca y que además se vio enturbiada por RuizMateos y el caso Rumasa.
Sin embargo, el tiempo lo cura todo, y desde el Consejo Regulador tienen claro que la apuesta por la gastronomía debe ser el futuro.