Italia aumenta el déficit, pero no consigue estimular la economía
Las tensiones en el Gobierno transalpino perjudican al Presupuesto del Estado
Unos Presupuestos con 31.000 millones de recursos adicionales que, sin embargo, no sirven para estimular la estancada economica italiana. El Gobierno transalpino acaba de enviar a Bruselas el borrador de su ley presupuestaria, basada en una flexibilidad, con respeto a las normas comunitarias sobre el déficit de 14.000 millones de euros. Empresas, economistas y analistas sin embargo destacan que, a pesar del aumento del déficit (un 2,2 por ciento en 2020 con respeto al 1,6 por ciento previsto por las reglas europeas) Italia no conseguirá estimular mucho su crecimiento.
En su reciente World Economic Outlook, el Fondo Monetario Internacional indica que se están acumulando nubarrones en el cielo de la economia transalpina. El informe prevé un crecimiento cero para 2019 (un 0,1 por ciento menos con respeto a las anteriores previsiones) y un progreso del PIB de apenas el 0,5 por ciento en 2020 (medio punto porcentual en menos con respeto a las anteriores previsiones). El FMI se alinea así a la principal patronal italiana, Confindustria, muy poco optimista con respeto a la situación economica del país. En sus recientes Escenarios Económicos la oficina de estudios de la patronal indica que el recorte de la cuña fiscal previsto por el Gobierno permitirá un crecimiento de apenas el 0, 4 por ciento (el Ejecutivo estima un 0,6), mientras el déficit se disparará en 2020 más allá del 2,2 por ciento indicado en los Presupuestos hasta rozar el 3 por ciento. Tampoco el FMI cree a las previsiones de Roma y indica que el déficit italiano alcanzará el año que viene el 2,5 por ciento. Los datos del Fondo, además avisan que la abultada deuda pública transalpina no parará de crecer, pasado del 133,7 por ciento del PIB en 2020 al 134 por ciento en 2024. Según los analistas de Washington Italia tendría que asumir un “compromiso creíble” para la reducción de la deuda. Algo que sin embargo no aparece en los Presupuestos para el año 2020.
“No hay nada para los jóvenes y nada para el crecimiento. No es que nos esperábamos fuegos artificiales pero sí un poquito más de coraje” ha indicado el presidente de los jóvenes empresarios italianos Alessio Rossi, comentando el borrador del presupuesto.
De hecho el plan recién presentado es el fruto de una larga negociación entre los partidos que apoyan al Gobierno de Giuseppe Conte
El PIB italiano apenas crecerá el 0,5% en 2020, por debajo de las previsiones inciales
La deuda pública no para de crecer y llega al 133,7% en 2019 y alcanzará el 134% en 2020
(Movimiento 5 Estrellas, Partido Demócrata e Italia Viva de Renzi) y el resultado es un compromiso que incumple muchos de las promesas de los últimos meses.
Hay que destacar sin embargo que el margen de maniobra del nuevo Ejecutivo era muy estrecho: 23.0000 de los 31.000 millones de recursos adicionales se utilizarán para evitar la subida del IVA prevista por una cláusula de salvaguardia del anterior Presupuesto. Estas cláusulas obligan a una subida de los impuestos si no se obtienen los ingresos previstos a través de otras medidas.
Con los 8.000 millones que quedan el Gobierno italiano lanza un recorte de la cuña fiscal a partir de la segunda mitad de 2020 (con un coste de 3.000 millones de euros, con respeto a los 5.000 millones que se habían anunciado) y asigna 3.000 millones para la renovación de los convenios de la administración pública. Esta medida (igual que la reducción del copago sanitario y 2.000 millones de inversión para la construcción y renovación de hospitales) pretende guiñar el ojo a la ala socialdemócrata del PD, así como a la pequeña federación de izquierdas Libres e Iguales que apoya al Ejecutivo. En las negociaciones el M5E, en cambio, ha logrado que no se toque la bajada de la edad de jubilación (que había aprobado junto a la Liga en el anterior Gobierno), mientras el nuevo movimiento de Matteo Renzi, Italia Viva ha obtenido un aumento de los subsidios a las familias: todas las actuales desgravaciones fiscales se sustituirán, en 2020, con un “cheque unico” para cada hijo aunque falta por cuantificar el importe.
Roma espera durante las próximas semanas una carta de la Comisión europea pidiendo aclaraciones sobre el aumento del déficit. Más que un advenimiento se trata de un paso formal, necesario para iniciar las negociaciones: de hecho todo indica que Bruselas otorgará al nuevo Gobierno italiano - mucho más conciliador con Europa con repuesto al anterior - la flexibilidad pedida.