Invesco pone un cortafuegos en sus fondos ingleses
La firma quiere frenar la salida de inversores de bolsa británica
La sombra de Neil Woodford está siendo más alargada de lo que Invesco –donde se labró su fama como gestor gracias a los buenos datos de rentabilidad– jamás hubiera pensado, cuando decidió abandonar la firma y montar su propia gestora hace cinco años.
Los malos resultados de sus productos en su etapa como independiente llevó a algunos inversores a pedir el reembolso de su dinero, lo que destapó la iliquidez de sus fondos al tener una gran parte de sus inversiones en compañías no cotizadas. Y esto agravó el problema porque las salidas de dinero se multiplicaron entonces y Woodford
fue apartado de la gestión.
¿Cómo ha afectado a Invesco esta situación? Mark Barnett, que era el segundo de Woodford en la gestora británica, fue puesto bajo la lupa de los inversores por si hubiera podido incurrir en las mismas prácticas. Aunque esto es casi imposible en un firma del tamaño de Invesco, donde existe un control más estricto de las inversiones, los pobres resultados cosechados por los fondos de Barnett, responsable de los productos de renta variable de Reino Unido para clientes de las islas británicas, encendieron todas las alarmas, al comenzar a incrementarse la salida de dinero.
Invesco ha decidido cortar por lo sano y situar como corresponsable de estos fondos, que no se comercializan en Europa continental, a Martin Walker, que lleva la parte de bolsa británica en los fondos registrados en Luxemburgo bajo el paraguas de Uctis, un reconocimiento al éxito de su estrategia y una forma de señalar a los inversores el cortafuegos creado.
El caso Woodford está siendo muy mediático en Reino Unido por las pérdidas que han afrontado grandes inversores institucionales. De ahí el foco puesto también sobre Barnett. Pero los selectores de fondos consultados recuerdan que los fondos de Invesco comercializados en España no tienen nada que ver con este gestor.