Aena busca ahorrar 95 millones al mes para sobrevivir al virus sin un Erte
Para obras y renegocia los contratos de seguridad y limpieza para salvar la caja
Aena maniobra para sobrevivir a la crisis del coronavirus sin lanzar un ajuste temporal de empleo. El gestor semiprivado ya ha recortado la capacidad de sus aeropuertos con el cierre de pistas, terminales y zonas de embarque para adaptarse a la nueva operativa de mínimos y ahora ha puesto en marcha un plan de ajuste para ahorrar 95 millones de euros al mes mientras que ha abierto conversaciones con la banca para lograr nuevas líneas de crédito y reforzar su posición de liquidez.
La compañía ha informado de que el tráfico de pasajeros de marzo acumula una caída del 45% y que solo el 24 de marzo éste fue un 97% inferior al mismo día del año pasado, que cayó en domingo. Así, se espera que la red de Aena funcione al 10% de su capacidad en las próximas semanas, lo que implica que sus ingresos van a desaparecer prácticamente y tendrá que vivir de la caja de 1.325 millones.
Aena asegura que no se plantea realizar un Erte (“no está sobre la mesa”, dicen) pero sí que necesita recortar costes y frenar inversiones para preservar la caja y sobrevivir a la crisis sin pedir un rescate. Así, la compañía ha puesto en marcha un plan para reducir su base de costes operativos en un 30% y ha paralizado todas las obras para dejar de pagarlas.
En concreto, la compañía que preside Maurici Lucena ha empezado a renegociar a la baja los contratos de servicios (seguridad, limpieza y mantenimiento), a eliminar gastos no estructurales de los servicios centrales y ha paralizado contrataciones no esenciales para ahorrar 43 millones de euros al mes. Aena renovó hace algo más de un año los contratos de los filtros de seguridad con un alza del presupuesto del 35% y el año pasado adjudicó los de limpieza tras duplicar su dotación económica por el rápido crecimiento del tráfico de pasajeros.
En cuanto a las obras, Aena ha paralizado temporalmente su programa de inversiones, lo que supondrá una reducción mensual de las salidas de caja de aproximadamente 52 millones de euros.
Adif frena los proyectos También Adif ha visto afectada su actividad, de manera que ha tenido que paralizar o frenar más de la mitad de sus obras de AVE. Así, de los 145 contratos de “especial relevancia” de la red de alta velocidad, 67 están en ejecución, 50 tienen algunas afectaciones que condicionan los trabajos, en 21 se han detenido y en siete se ha solicitado la suspensión. Mientras, en la red convencional, de 58 contratos, 48 avanzan con normalidad, seis se han ralentizado y en cuatro se ha pedido suspenderlos. La compañía que preside Isabel Pardo de Vera, en todo caso, “va a costear el salario de los trabajadores, el alquiler de maquinaria y otros gastos”, como establece el RD-ley de medidas extraordinarias contra el Covid-19.