La deuda periférica celebra que el BCE se quita límites
El mercado devora bonos de Portugal y Grecia en el inicio del PEPP y la entidad reconoce que podrían ampliar las compras
Los detalles del nuevo plan de compras de deuda del Banco Central Europeo, el Programa de Compras de Emergencia por Pandemia (PEPP) empiezan a salir a la luz. En el documento que se publicó ayer en el portal que recoge el Derecho de la Unión Europea, que explicaba los detalles legales del nuevo programa del BCE, se confirma que el organismo no tendrá que ceñirse al límite del 33% de deuda que puede comprar de cada emisor en este programa de emergencia, que ya muchos daban por hecho.
Esto supone un cambio importante respecto a los programas de compras de deuda del pasado, y al que sigue en vigor, en paralelo al PEPP, que sí impide que el organismo pueda adquirir más de un tercio de la deuda emitida por un solo país. En los últimos meses este límite había empezado a resonar como un posible problema de cara a que el BCE pudiese seguir con su programa de compras, dado que se acercaba, en algunos países, al límite que se imponía a sí mismo el organismo.
Reconoce que puede crecer Al margen de la nueva flexibilidad del BCE, que le permitirá actuar con agilidad en aquellos países que más sufran el impacto del coronavirus, el organismo también ha dado un paso al frente muy significativo: en su portal web el BCE ha publicado nueva información sobre el programa, entre la que destaca el fuerte compromiso de la entidad para sostener la ayuda a los países de la zona euro, al indicar que “el Consejo de Gobierno está totalmente preparado para aumentar el tamaño de las compras en el programa y a ajustar su composición todo lo que sea necesario y durante el tiempo que sea necesario”.
En este mismo documento la entidad informa de que las compras del nuevo programa han empezado a realizarse hoy, dando el primer paso a un plan por el que, como mínimo, el organismo inyectará 750.000 millones de euros, como poco hasta que termine el año, y como muy tarde, hasta que consideren que la crisis del coronavirus ha pasado.
El mercado ha celebrado estas noticias centrándose en los países periféricos. Ayer, a media sesión de bolsa estadounidense, la rentabilidad del bono italiano retrocedía 32 puntos básicos, la del español 30, y
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