La Tagliattela tiene un ‘agujero’ de 770 millones y duda de su futuro
El grupo de restauración pierde 162 millones
La cadena de restaurantes Amrest, propietaria de la enseña La Tagliatella, acumula un agujero de 770 millones de euros y el auditor ha puesto en duda la viabilidad de la empresa.
La viabilidad del grupo de restauración Amrest, propietario entre otras marcas de La Tagliatella, está en el aire. En el informe del primer semestre, KPMG, que ha auditado sus cuentas, alerta de “dudas significativas sobre la capacidad del grupo para continuar como empresa en funcionamiento” después de que el pasivo corriente supere al activo en 770,8 millones de euros y la compañía tenga, por lo tanto, un fondo de maniobra negativo.
El auditor explica que Amrest “ha incumplido determinados compromisos financieros vinculados a las cifras a 30 de junio de 2020 y estipulados en el préstamo de financiación sindicada y, por tanto, la deuda asociada a dicha financiación ha sido clasificada en el pasivo corriente”. Todo ello a pesar de que a 1 de septimebre el grupo ha recibido autorización de las entidades financieras para dicho incumplimiento.
La compañía cerró el primer semestre con unas pérdidas después de impuestos de 162 millones de euros, después de haber ganado 11 millones en el mismo periodo del año anterior. Debido al cierre de los restaurantes como consecuencia de la pandemia a partir del 14 de marzo, las ventas se han reducido a 653,8 millones de euros, lo que supone una caída del 25% respecto al ejercicio anterior.
Pese a las dudas del auditor, el consejo de administración ha analizado la situación del grupo en el contexto del Covid-19 “en lo concerniente a la posición de liquidez, situación financiera y garantía de la continuidad de las operaciones”, garantizando las mismas, al menos, durante un periodo de 12 meses.
“Dados los posibles escenarios estudiados y el análisis de la información disponible, los datos, las circunstancias actuales y las incertidumbres sobre el futuro, el consejo de administración valora la capacidad del grupo para continuar como empresa en funcionamiento durante el futuro próximo, es decir, durante un periodo de al menos (pero no limitado a) doce meses desde la fecha de cierre”, señala en
El consejo de administración solo garantiza las operaciones durante un año
el informe de las cuentas semestrales. Amrest tramitó un Erte que afectó a 3.288 empleados en España. A 30 de junio de 2020 había todavía 1.957 empleados que continuaban con el empleo suspendido debido a la crisis.