Pymes y autónomos temen el fin de la carencia de pago
La falta de la recuperación de la economía y las cada vez mayores restricciones a la movilidad han imposibilitado la buena marcha de pymes y autónomos, que miran con temor el momento de afrontar el pago de los avales ICO.
Las compañías comenzaron a pedir estos préstamos en abril, no obstante, el Real Decreto-ley permitía a los deudores solicitar una carencia de pago de hasta un año como máximo para afrontar la deuda. Es decir, aquellas compañías que quisieron, pidieron los préstamos, pero negociaron con la banca no comenzar a pagarlos de inmediato.
Así, cada cliente negoció sus condiciones y plazos. Sin embargo, desde la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) advierten que fueron muchos los que solicitaron una carencia de pago de tan solo seis meses y no de un año; por lo tanto, tienen que afrontar el abono de la deuda a partir de octubre, a pesar de que no se han recuperado económicamente.
Desde ATA señalan que más de 1,6 millones de autónomos han visto caer su actividad en 2020 por encima del 60% y más de 370.000 mantienen cerrado su negocio en estos momentos. Asimismo, el 47% de los autónomos del país se ha visto en la necesidad de solicitar los avales ICO para obtener liquidez y poder seguir haciendo frente a sus obligaciones, como los salarios y las cotizaciones de sus empleados.
Más desempleo Sin embargo, casi el 70% de ellos no ha podido afrontar la situación con normalidad y han aplicado Ertes y ajustes de plantilla desde que empezó la crisis del coronavirus. Otro 34% apunta a que tendrán que recortar el número de empleados en el futuro, según las conclusiones que refleja el VI Barómetro de ATA presentado este jueves. “Estamos en una situación de emergencia. Y vamos tarde. Es necesario implementar medidas ya, que salven actividades de autónomos, sus empresas y los empleos que generan”, aseguró el presidente de la asociación, Lorenzo Amor, quien añadió que el gremio está en una situación extraordinaria, que necesita de medidas extraordinarias.