Ford garantiza un nuevo motor y da trabajo a Almussafes
Da marcha atrás y Almussafes seguirá exportando la ‘Transit’ a Norteamérica
El fabricante de automóviles Ford da aire a su factoría en España, precisamente en un momento en que se encuentra en su momento productivo más bajo de la última década. La marca ha anunciado la adjudicación de uno de sus motores de gasolina, el GDI 2.0, a la planta de Almussafes (Valencia).
Un encargo que empezará a producir a partir del próximo verano y se prolongará al menos hasta finales de 2023, lo que garantiza la continuidad de la planta de motores del complejo, con cerca de mil trabajadores.
Con este anuncio la multinacional despeja la incertidumbre que pesaba sobre esta actividad. Hace ahora casi un año, en pleno plan para reajustar su filial en Europa,
Ford anunció que trasladaba la producción de los motores Ecoboost desde Valencia a sus plantas en Norteamérica. Una medida que suponía dejar sin carga de trabajo a las líneas de propulsores de Valencia a finales del próximo año.
El nuevo motor que fabricará la planta española también tendrá como destino el mercado norteamericano, según explican fuentes de UGT en el comité de empresa. Con todo, el reto para la planta es asegurarse las futuras versiones de motores híbridos. La inversión para el nuevo motor se cifra en 10 millones de dólares (8,5 millones de euros).
Más allá de ese desembolso, la decisión también conlleva la marcha atrás en otra de las medidas que afectó a Almussafes en su plan de reestructuración en Europa. La marca había comunicado que las
Transit Connect que vende en Estados Unidos, Canadá y México ya no se produjeran en Valencia el año que viene, de forma que Almussafes solo mantendría la fabricación para Europa, eso suponía reducir cerca de un 10% el volumen de vehículos anuales antes de que los efectos de la pandemia hayan desplomado la fabricación.
Actualmente la factoría de montaje de Almussafes está aplicando un expediente de regulación temporal de empleo (Erte), por el que trabaja únicamente con uno de sus tres turnos. El mantenimiento de la producción de la Transit para Norteamérica, el segundo modelo que más produce en Valencia tras el Kuga, supone un respiro para garantizar los niveles de la cadena de montaje ante los altibajos de la demanda en Europa.