EN EL CENTRO DE LA SUBIDA FISCAL
Moncloa insiste en sus alzas impositivas, a contracorriente del entorno europeo
El Gobierno de Pedro Sánchez comienza ya a perfilar la subida fiscal en la que tanto ha insistido desde que accedió a Moncloa. Ni la crisis económica y sanitaria sin precedentes que ha estallado en los últimos meses ha impedido que el Ejecutivo abandone su hoja de ruta de alzas impositivas. Pese a las recomendaciones de expertos, agentes sociales e, incluso, la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, el Gobierno tiene ya en el punto de mira dos sistemas impositivos sobre los que comenzar la escalada tributaria. Las pensiones y los tipos reducidos del IVA serán los primeros.
Al menos, son las dos figuras que despiertan mayor consenso entre los expertos y que figuran en las recomendaciones de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef ). La intención del ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, por otra parte también expresidente de la Airef, es trasladar los incentivos de los planes de pensiones individuales, eliminando la desgravación fiscal, para llevarlos a los planes de empleo. El Ejecutivo quiere así la bonificación en el Impuesto sobre Sociedades a las aportaciones de las compañías al plan de ahorro de sus empleados. En julio, la Airef atacó las desgravaciones de los planes de pensiones a través de su estudio de evaluación de gasto en políticas públicas, y más concretamente en beneficios y exenciones fiscales. La Autoridad Fiscal asegura que los incentivos a estos planes de previsión social complementaria no cumple con el objetivo de generar ahorro a largo plazo para la jubilación con un coste para las arcas públicas de 1.643 millones de euros. “Es necesario reformular estos incentivos”, recalcaba la presidenta de Airef, Cristina Herrero, durante la presentación de Spending Review 2019/2020 sobre los beneficios fiscales.
La reforma del IVA Otro de los impuestos sobre los que trabaja ya Moncloa es el IVA. La reforma de los tipos reducido y superreducido permitirá optimizar la recaudación. Sin embargo, una subida o una reforma del impuesto en plena crisis del coronavirus Covid19 afectará al consumo y a las familias, las principales beneficiadas de los tipos reducidos de IVA.
En cualquier caso, el Gobierno ya ha empezado a revisarlos. Esta semana fuentes de Moncloa aseguraron que el Ejecutivo incluirá en los Presupuestos Generales del Estado un gravamen del IVA del 21% para la sanidad y la educación privadas, actividades que hasta ahora estaban exentas de este impuesto.
La propuesta del Gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, de revisar los bienes y servicios vinculados a los tipos reducido –del 10%– y superreducido –del 4%– del IVA permitiría mejorar la recaudación de los 35.262 millones que se recauda a través de estos productos. En concreto el tipo del 10% recauda para las arcas públicas 25.102 millones y el superreducido del 4% un total de 10.160 millones. La recaudación total del IVA ascendió en 2018 a 70.177 millones, un 10,3% más que en 2017.
Sin embargo, la medida despierta opiniones encontradas entre los fiscalistas. “Coincido en que debería llevarse a cabo una revisión del listado de bienes y servicios con tipos reducidos y superreducidos porque hay demasiadas inequidades,
El Gobierno quiere trasladar los incentivos de los planes de pensiones a los de empleo