Anfac pide un Plan ‘Moves III’ por valor de 450 millones de euros
Estos incentivos acompañarían a una revisión del impuesto de matriculación
La Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) ha propuesto un Plan Moves III de 450 millones de euros de dotación, de los que 250 millones habrían de destinarse a vehículos eléctricos y los 200 millones restantes, a infraestructuras, así como una revisión del impuesto de matriculación. Es una de las iniciativas propuestas por la junta directiva de la patronal, celebrada el pasado 9 de octubre, y que, en línea con el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la economía española presentado por el presidente del Gobierno, harían factible el cumplimiento de los objetivos del Plan Nacional de Energía y Clima tanto de reducción de emisiones de CO2 como de introducción de los vehículos eléctricos en el parque automovilístico español.
La patronal entiende que la consecución de estos objetivos apuntados en el plan de Recuperación y en el PNIEC ha de abordarse desde una doble vía: desde el fomento de la entrada en el mercado de vehículos electrificados así como desde la renovación del parque.
Desde Anfac apuntan que han de alcanzarse los 48.000 puntos de recarga de acceso público para el 31 de diciembre de 2022, donde, al menos, exista uno por cada 100 kilómetros de carretera de la Red Básica de Carreteras y Red General de Carreteras del Estado.
Así, para el 31 de diciembre de 2025, deberían haberse instalado 110.000 puntos de recarga de acceso público, para así alcanzar los necesarios 340.000 puntos para 2030.
Puntos de recarga Dentro de estos objetivos se deberá priorizar la instalación de los puntos de recarga rápida y ultrarrápida. Todo esto ha de ir acompañado de un sistema de información de los puntos de recarga públicos y privados accesibles al público y que garanticen la interoperabilidad, que ha de ponerse en marcha antes de fin de año.
Asimismo, para la renovación del parque y el descenso de las emisiones, es necesario realizar un impulso sostenido al achatarramiento de vehículos de mayor antigüedad, que idealmente debe ser superior en volumen a las
matriculaciones de vehículos nuevos, un fenómeno que no se ha conseguido desde 2013.
Por otro lado, el presidente de la patronal, José Vicente de los Mozos, mostró su preocupación por la “indefinición administrativa al respecto de la actualización de los tramos del impuesto de matriculación a la normativa de medición de emisiones WLTP”, actualización que entraría en vigor el 1 de enero de 2021. El impuesto, si no hay cambios, subiría de manera automática e incrementaría los precios de los vehículos vendidos a partir de esa fecha. Este ascenso en los precios afectaría a cerca del 50% del mercado total, con un impacto especial a los vehículos fabricados en España.