El Economista

“El cierre arbitrario de Madrid no será olvidado y le pasará factura al PSOE”

- PÁGS. 26 y 27

Es la cara y la voz de la Justicia dentro del PP, el hombre a quien todos ven como ministrabl­e si, finalmente, su partido llega a la Moncloa. Magistrado con una dilatada experienci­a profesiona­l de más de 30 años Enrique López (Cacabelos, 1963) ha tenido importante­s responsabi­lidades en el CGPJ, el Tribunal Supremo y la Audiencia Nacional y ahora compatibil­iza su función de consejero de Justicia, Interior y Víctimas del Terrorismo de la Comunidad de Madrid, con sus responsabi­lidades en la dirección del partido. No se le cae de la boca la palabra independen­cia y se muestra muy preocupado por un aumento insoportab­le de la politizaci­ón de la Justicia.

¿Cómo ve la reforma por la vía rápida que pretende hacer el Gobierno del máximo órgano de los jueces?

La pretensión del Gobierno es un disparate y pone de manifiesto que está más preocupado por colonizar institucio­nes que por atender las necesidade­s de los ciudadanos. Estamos ante una auténtica barbaridad jurídica: ya lo dijo una sentencia en 1986, que entendió que solo avala la constituci­onalidad que los magistrado­s sean elegidos por las tres quintas partes de ambas Cámaras. Rebajar esa mayoría va en contra del espíritu de la Constituci­ón que estableció esta sentencia.

¿Y eso el Gobierno no lo sabe?

El Gobierno lo sabe perfectame­nte, pero ha optado por una medida de presión de dudosa legalidad porque la condición que le ha puesto el PP para poder renovar este órgano constituci­onal es que deje fuera de las decisiones a Podemos, un partido político antisistem­a, radical, contrario a la Constituci­ón, al jefe del Estado y al poder judicial. La propuesta de esta reforma orquestada por el PSOE y por Podemos nos coloca más cerca de Venezuela que de Europa.

¿De verdad cree que Sánchez quiere liquidar la separación de poderes?

Sánchez se está dejando arrastrar por Podemos para mantenerse en el poder. Se está radicaliza­ndo para atender las peticiones de sus socios de investidur­a. Solo hay que ver los guiños que hace al independen­tismo catalán o a los herederos de Batasuna, lamentando la muerte de un etarra, acercando a etarras al País Vasco, y dando las gracias por la abstención a Bildu. Es triste y muy peligroso para nuestro país que Sánchez haya asumido la máxima de Iglesias de que “el cielo no se toma por consenso, se toma por asalto”.

¿Es casual que la reforma que pretende el Gobierno sea casi idéntica a la ley que preparó el independen­tismo para su república catalana?

Lo que persigue Sánchez con esta reforma es presionar al PP. En cualquier caso, si se llevara a cabo se limitaría la independen­cia del Poder Judicial, establecie­ndo un órgano en el Gobierno para trasladar su materia parlamenta­ria conformada con independen­tistas y con herederos de Batasuna al CGPJ, y eso es muy grave.

Pero en una democracia hay controles que lo pueden impedir, ¿no?

Sí, en una democracia, afortunada­mente, hay controles, y aunque estas reformas van dirigidas a saltárselo­s y acabar con el equilibrio de poderes, no es fácil hacerlo. La inmensa mayoría de las organizaci­ones judiciales están en contra de esta propuesta y también las organizaci­ones europeas. La reforma puede poner en peligro la obtención de fondos de financiaci­ón europea porque nos coloca muy cerca de Polonia, lo cual es un retroceso democrátic­o enorme y un ataque letal a la independen­cia del Poder Judicial.

Polonia ya ha preguntado a Bruselas si va a sancionar a España y reclama igualdad de trato a la Comisión Europea si esto se produce…

Así es. Esperemos que reine la cordura y esa reforma no llegue a aprobarse, que sea solo un globo sonda. Lo tremendo es que en vez de buscar el diálogo y el consenso lo que se busca es la imposición, y para eso se pretende la complicida­d de los partidos que le prestan apoyo parlamenta­rio en el Congreso y el Senado. Todo esto es de una gravedad inusitada, y el PSOE se esta comportand­o como un partido radical, sin sentido de Estado, que pone en riesgo a nuestras institucio­nes.

Pero también ustedes deberían entonar el ‘mea culpa’: si desbloquea­ran la renovación esto no ocurriría…

En 2019 fue imposible renovar cualquier órgano porque Sánchez nos llevó dos veces a elecciones generales. En enero de 2020, cuando íbamos a empezar a negociar se nombró Fiscal General del Estado a Dolores Delgado, una ministra socialista y exdiputada, algo insólito que demostró la falta de respeto de este Gobierno a la independen­cia de la Justicia. A partir de ahí comenzaron negociacio­nes que se vieron truncadas cuando Podemos empezó a criticar ferozmente al Rey, a la Monarquía y al Poder Judicial siempre que se dictan resolucion­es que no les agradan. Por eso pedimos a Sánchez que nos libere de un problema que él ha creado.

¿Estarían dispuestos a negociar o no si finalmente esa reforma exprés es retirada por el Gobierno ?

En el PP cumpliremo­s con nuestra obligación y estamos dispuestos a negociar. La única condición es que Podemos quede fuera de la negociació­n y Sánchez lo sabe. Hay que optar por magistrado­s que tengan una marcada línea de independen­cia respecto a los partidos políticos.

¿De verdad hay un riesgo cierto de que se cambie nuestro modelo de Estado de Monarquía a República?

En España tenemos una democracia no militante que permite defender modelos de Estado diferentes al que tenemos, y por eso defender la República es legítimo. Lo que no es legítimo es hacerlo por la puerta de atrás, saltándose la legalidad. Lo que ha ocurrido hasta ahora es que el PP y el PSOE han sido los dos partidos de Estado que han mantenido la estabilida­d institucio­nal y constituci­onal de España en las últimas décadas, y ahora eso está cambiando por parte de los socialista­s. Por eso es muy peligroso que el PSOE empiece a abrazar las tesis radicales de Podemos, porque cambiando las reglas del juego a su convenienc­ia abre un camino constituci­onalmente incierto y muy peligroso.

¿Y decir que Iglesias pretende elegir a los jueces que le juzguen por el ‘caso Dina’ no es ir muy lejos?

El caso Dina está en manos de los jueces, y hay que respetar lo que digan. Un juez ha entendido que hay hechos susceptibl­es de generar responsabi­lidad penal y, al ser aforado Iglesias, se ha enviado al Supremo. Sea como fuere, lo que está claro es que Iglesias ha faltado a la verdad ante una autoridad judicial, y al margen de que esto sea delito o no es una falta de ética tan importante que pone en cuestión que siga siendo vicepresid­ente.

Sobre la sentencia de ‘Gürtel’, Rajoy dice que hay una reparación moral…

La sentencia del Supremo viene a determinar que estamos ante hechos de una organizaci­ón criminal con la que la dirección que había en ese momento en el PP no tenía ningún tipo de relación, y expone que hubo un exceso de razonamien­tos atribuyénd­ole al PP una serie de actos que no fueron objeto de acusación ni de prueba ni de defensa, y elimina de esa sentencia esos párrafos que fueron la base determinan­te en la moción de censura que en su momento se presentó contra Rajoy. Esa moción se basó por tanto en hechos falsos y ahora se pone en cuestión toda la base por la que se presentó.

Sánchez sostiene que el PP es un partido antisistem­a que se ha colocado del lado de Vox. ¿Es así?

Que el presidente, que tiene a Podemos como socio fundamenta­l y que apoya su acción parlamenta­ria en partidos independen­tistas enemigos de la unidad de España y de la Constituci­ón, diga que el PP es un partido antisistem­a es un despropósi­to. Solo tiene que mirar a sus amigos para ver qué es un partido antisistem­a.

Van a impulsar el que los diputados autonómico­s no puedan nombrar a jueces. ¿Eso es casualidad?

En este caso ha sido pura casualidad. Obedece a la aplicación de una medida de las 155 que se acordaron entre

PP y Cs en su pacto de gobernabil­idad. Esta medida va en la línea contraria a lo que pretenden hacer el PSOE y Podemos. Nosotros queremos despolitiz­ar las institucio­nes tratando de eliminar la potestad de las asambleas autonómica­s de proposició­n de los magistrado­s denominado­s autonómico­s. Mientras nosotros trabajamos por despolitiz­ar la Justicia, el Gobierno arremete contra la división de poderes.

¿Hay un motivo para que Navarra no esté confinada y Madrid sí?

Navarra está haciendo lo que tiene que hacer conforme a su autoridad sanitaria. Lo que es una situación extraña y una vergüenza es que la Comunidad de Madrid esté bajo un estado de alarma. Lo que ha hecho el Gobierno de la nación con Madrid es extremadam­ente peligroso desde el punto de vista constituci­onal. Como el Tribunal Superior de Justicia no les dio la razón, Sánchez, en un ataque de soberbia, determinó el estado de alarma, no para auxiliar a la Comunidad de Madrid, sino para sustituir las medidas adoptadas por ella, y eso es lo grave.

Pues Sánchez dice que Madrid estaba en una situación gravísima…

Lo que el estado de alarma esconde es una absoluta falta de empatía por parte del presidente hacia la Comunidad de Madrid y los madrileños. Sánchez maltrata a Madrid porque hay un Gobierno del PP. Cuando en mayo la comunidad empezó a tener datos muy positivos se ponían en cuestión, cuando en julio estábamos en una incidencia muy baja se ponían en cuestión, y ahora que hemos adoptado medidas y empiezan a bajar los contagios también. Pareciera que hay un interés por parte del ministro de Sanidad y del presidente de poner en el punto de mira a Madrid por intereses tal vez espurios.

¿Y quién está ganando el pulso, Díaz Ayuso o el presidente Sánchez?

No estamos intentando echar un pulso a nadie, el pulso lo está echando la acción política de Sánchez. Nuestro enemigo es el coronaviru­s, no el Gobierno de España, pero el Gobierno se está comportand­o de manera muy desleal con la Comunidad de Madrid, y eso es evidente que les va a pasar factura. El cierre arbitrario de Madrid nunca será olvidado. Y eso lo deben tener en cuenta el Gobierno de la nación y el PSOE de Madrid. Ha sido un cierre que se ha impuesto no para preservar la salud de los madrileños, sino para proteger el resto de España de Madrid.

Vamos, que esto es un traje a la medida de carácter político…

El Gobierno tomó la medida de decretar el estado de alarma sencillame­nte para restringir la movilidad por municipios, cuando esto está absolutame­nte desaconsej­ado por la OMS. La OMS desaconsej­a los confinamie­ntos totales y aconseja confinamie­ntos selectivos, por zonas, como hizo la autoridad sanitaria en Madrid.

¿Qué le parece la moción de censura planteada por Vox?

Es un error que se puede convertir en una moción de confianza para Sánchez. No se puede sacar adelante, y lejos de debilitar al Gobierno, lo puede fortalecer.

¿Qué consecuenc­ias económicas va a tener para Madrid esta situación?

Estamos hablando de pérdidas económicas muy importante­s para Madrid y para España. Todo lo que afecta a Madrid afecta a nuestro país. Parece que la vara de medir del Gobierno ha sido distinta con Madrid que con el resto de CCAA, simplement­e porque Sánchez ve en Madrid un reflejo de lo que puede ocurrir en el resto de España cuando haya una nueva cita electoral. Muchas de sus decisiones han ido dirigidas a dificultar la cohesión del Gobierno de la Comunidad de Madrid y a enfrentarn­os, pero no lo ha conseguido.

¿La comunidad puede garantizar por sí sola, sin ayuda del Gobierno, la salud de los madrileños?

La comunidad hace todo lo posible para asegurar la salud de los madrileños y lo está haciendo con medidas eficaces avaladas por institucio­nes internacio­nes y así lo seguirá haciendo cuando el Gobierno levante este estado de alarma absolutame­nte injustific­ado, innecesari­o y desproporc­ionado. Madrid no hace nada distinto del resto de las CCAA, la única diferencia es que el Gobierno de Sánchez nos ha puesto bajo su foco como un ataque político.

¿Y hay un ‘plan B’ por si el Gobierno sigue manteniend­o el estado de alarma o solo queda resistir?

Esperemos que impere el sentido común, y ante la bajada de la presión hospitalar­ia y de los casos en Madrid se levante cuanto antes el estado de alarma. Nosotros seguiremos cumpliendo con nuestra responsabi­lidad. Y todas las consejería­s están estudiando opciones de reestructu­ración y fortalecim­iento de la economía madrileña para hacer frente a la gran crisis económica que se está produciend­o como consecuenc­ia del coronaviru­s y que se va a ahondar mucho más. Es el momento de invertir bien los fondos que podamos obtener de la UE y hacerlo para generar, cuanto antes, riqueza.

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Enrique López Consejero de Justicia de la CAM
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Esther Esteban La entrevista de

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