IBERDROLA INVERTIRÁ 150.000 MILLONES

Gana un 4,2% más en 2020, hasta los 3.611 millones, y subirá la retribución un 80% en 2030.

Beneficio

3.466,4 3.610,7 2019: 2020: +4,2% Diferencia

Dividendo

0,40 0,42 2019: 2020 +5% Diferencia

Iberdrola iluminó ayer sus expectativas para la década, indicando que invertirá 150.000 millones de euros hasta 2030, ejercicio en el que retribuirá al accionista con 0,75 euros por título, un 78% más que los 0,42 euros por acción que propondrá a la Junta con cargo a 2020. El pasado año ganó 3.611 millones, un 4,2% más que en 2019, por debajo de las expectativas del mercado, que auguraba un resultado de 3.690 millones. Para 2021 confía en obtener un beneficio de 3.700 a 3.800 millones y un dividendo de 0,44 euros por acción. La compañía subió un 1,37% en el parqué.

La empresa presidida por Ignacio Sánchez Galán presentó en noviembre su Plan Estratégico 20202025, con unas inversiones de 75.000 millones durante el período y un resultado previsto de 5.000 millones el último año, con un pay out del 65% al 75% –de 0,53 a 0,56 euros por título en 2025– y un suelo de 0,44 euros por acción. También dio un par de pinceladas sobre su visión a 2030, tal que disponer de una capacidad renovable de 95 GW y un valor de activos de red de 60.000 millones.

Duplicar tamaño y resultados

Ayer, coincidiendo con la presentación de resultados del pasado 2020, anunció más elementos de estas previsiones, tal que invertir de 150.000 millones durante toda la década y, al final del período, alcanzar los 70 millones de contratos, un beneficio de 7.000 millones y abonar un dividendo de 0,75 euros por título, un 90% más elevado que en el año 2000. Durante la multiconferencia con los analistas, Galán lo dijo claramente: “Nuestro objetivo consiste en duplicar el tamaño y los resultados de este grupo en los próximos 10 años”.

De momento, la compañía presentó ayer el balance del año del Covid-19, en el que facturó 33.141 millones, un 9% menos que en 2019. El resultado bruto operativo (ebitda) sufrió un impacto de la pandemia de 218 millones y una merma de 487 millones por el tipo de cambio, quedándose en 10.010 millones, unos 100 millones menos que el año anterior. Excluyendo estos efectos, el ebitda sube un 8%, hasta los 10.715 millones.

Por negocios, el 75% del ebitda procede de áreas reguladas –básicamente redes– y renovables, mientras que, por geografías, un 76% proviene de países con una calificación crediticia A. Cosechó un mal resultado en España, con un retroceso del 5%, aunque las inversiones crecieron un 21%, alcanzando los 2.100 millones.

Las inversiones totales batieron su récord, hasta los 9.246 millones, un 13% más que el año anterior, pero por debajo del objetivo de 10.000 millones anunciado reiteradamente durante el ejercicio. El 91% se destinó a renovables y redes; la potencia de fuentes verdes de la empresa creció en 4.000 MW, hasta los 35.000 MW.

El cash flow subió hasta los 8.192 millones, con una liquidez disponible de 17.400 millones de euros, cubriendo las necesidades de 24 meses. La compañía mantuvo su liderazgo en financiación verde con un total de 24.500 millones de euros emitidos en el ejercicio.

Incorporar PNM y CEB-D

La deuda se redujo un 6,4%, hasta los 35.142 millones, y su coste también bajó del 3,5% al 3,18%. Con vistas al final de 2021, crecerá en unos 1.000 millones, al incorporar al perímetro corporativo la tejana PNM Resources –que añade unos 7.000 millones– y la brasileña CEBD, que suma otros 400 millones, según dijo José Sainz, el director financiero, a los analistas.

Galán especificó que las inversiones de 21.000 millones ligadas a 150 proyectos candidatos a recibir fondos europeos se añadirán a los planes presentados.