Naturgy y PwC piden reformas para paliar la volatilidad en la tarifa de la luz
Recomiendan que el mercado spot tenga menos para que sea solo de ajuste
La transición energética va a requerir cambios en los mercados mayoristas de electricidad para poder adaptarlos a la entrada masiva de energías renovables.
La Fundación Naturgy, junto con PwC, han eleaborado e informe Los mercados mayoristas eléctricos y su adaptación a la transición energética, en el que apuestan por acometer una reforma que le dé más peso a los mercados a plazo.
El informe parte de la premisa de que, “para que todos los consumidores dispongamos de un suministro de calidad y que se ajuste a nuestro nivel de demanda, el sistema eléctrico necesita garantizar tres elementos indispensables: energía; potencia, para que la cantidad de energía que nos llega en cada instante sea la que esperamos; y servicios, para que la electricidad nos llegue con seguridad y calidad”, explica Oscar Barrero, socio líder del sector Energía de PwC y uno de los autores del informe.
El mercado eléctrico está diseñado en base la generación térmica convencional, que puede aportar estos tres elementos (energía, potencia y servicios). Por el contrario, no todas las renovables son capaces de suministrarlos de manera simultánea, por lo que deberían generarse mercados diferenciados que los garanticen, dando señales de precio eficientes para asegurar firmeza, flexibilidad y seguridad.
Según PwC, “España necesita disponer de un mercado a plazo líquido y profundo, ya sea mediante la negociación de contratos de compraventa a largo plazo o fomentando los actuales mercados”. En este sentido, consideran que el mercado spot debería adquirir “el rol de un mercado de ajuste”, dejando así de ser “el elemento primordial en la fijación del precio”.
En la mayoría de los países europeos, a diferencia de España, la electricidad se negocia principalmente en mercados a plazo, lo que permite conseguir una mayor estabilización de precios. En Francia, Alemania y Reino Unido, el volumen negociado en el mercado spot supuso solo el 24%, 39% y 55%, respectivamente, de la demanda total eléctrica en 2019. “En España se debería eliminar la obligatoriedad de paso de la electricidad por el mercado spot, algo que resta liquidez al mercado a plazo”, explica Barrero.
Asimismo, el estudio aboga por establecer un equilibrio entre el mercado de PPA (acuerdos de compra venta) y las subastas de capacidad renovable. “Las subastas permiten controlar la capacidad máxima renovable instalada, estabiliza su remuneración y reduce los riesgos asociados a estas plantas”. El informe recoge también que un diseño desproporcionado de las subastas puede dificultar el desarrollo de los mercados a plazo, lo que impediría el crecimiento de los de PPA. Barrero afirma que “las subastas solo serían recomendables en momentos de bajos precios de la electricidad e inestabilidad”.
Los autores consideran que España podría adoptar una serie de tendencias europeas y que todavía impulsarían más el papel de los mercados de ajuste, dando cabida a nuevos participantes como “los generadores renovables a gran escala o las soluciones de almacenamiento en baterías, así como recursos energéticos distribuidos como la gestión de la demanda, el almacenamiento de baterías a pequeña escala y la generación distribuida”.