La inteligencia artificial ayuda a ganar tiempo en el desarrollo
Reducir los tiempos de desarrollo y registro es el objetivo de las compañías farmacéuticas para poder ganar tiempo de explotación de su patente. Hasta ahora, la fase regulatoria y, sobre todo, el precio y la financiación de un medicamento, suele llevar casi dos años y, dependiendo del país, a veces más. De hecho, España no es uno de los países más rápidos del mundo, ni siquiera de Europa. En nuestro país, respecto a la autorización de la Agencia Europea del Medicamento, la entrada de un medicamento se demora hasta 15 meses. Luchar contra la administración está siendo una tarea prácticamente imposible, por lo que la mayoría de compañías farmacéuticas se han girado sobre sus propios procesos con el objetivo de reducir los tiempos de desarrollo. Ahí es donde entra en juego la inteligencia artificial, capaz de predecir mediante modelos matemáticos la respuestas de determinar las moléculas que pueden llegar al mercado. Hace pocas semanas, se conocía un proyecto de IBM centrado en antibióticos. Este tipo de fármacos comienza a escasear al tiempo que las bacterias existentes se hacen inmunes a las terapias actuales. La empresa informática prevé que con su sistema de inteligencia artificial se pueda descubrir un nuevo potencial antibiótico en apenas 48 horas. Toda una revolución.