La inflación también golpea a los bancos

La alta inflación mundial acabó con los tipos de interés nulos que, durante años, perjudicaron a los bancos. Sin embargo, la realidad es más compleja y se equivocan quienes creen que todo son ventajas para las entidades. También sufren incrementos cuantiosos de costes en su operativa, hasta el punto que estas partidas suman ya en España 21.500 millones, un 8,5% más que hace un año. Es una cifra de tal envergadura que se muestra capaz de borrar los efectos de los ajustes que el sector lleva a cabo desde 2012. No hay, por tanto, justificación alguna para políticas como la aplicada por el Gobierno español a través de un nuevo impuesto, basadas en la falacia de que éste es un sector privilegiado dentro de la actual situación económica.