“El Banco Europeo del Hidrógeno ayudará a incentivar el consumo”
Hoy se celebra el día del hidrógeno, que tendrá un papel clave en la transición energética. Javier Brey, presidente de la Asociación Española del Hidrógeno (AeH2), ha comentado a elEconomista.es todos los detalles sobre el avance de esta tecnología incipiente, que está en el centro del debate europeo.
¿Habrá nuevas convocatorias para el Perte de hidrógeno verde?
Se asignarán 1.155 millones en partes iguales entre 2022 y 2023. Hasta ahora se han convocado proyectos de demostración y tecnológicos, pero quedan por financiar los valle y la participación de empresas españolas en los llamados IPCEI (Proyectos Importantes de Interés Común Europeo). Ya se han realizado dos convocatorias, en la primera de ellas se aprobaron 41 proyectos, de los cuales cuatro españoles, y en la segunda 35 proyectos, 7 nacionales.
Se tiene que decidir la definición en el Acto Delegado de hidrógeno verde. ¿Cómo está el asunto?
Una de las medidas más polémicas es que las plantas de hidrógeno verde que se pongan en funcionamiento deberán ir acompañadas de unaplanta de electricidad renovable que las de suministro. A priori, esto encarece los proyectos, pero es una medida lógica. La idea de Europa es no fagocitar en el corto plazo las energías renovables ya desplegadas. Eso también permite que los sectores más tradicionales de las energías no contaminantes no vean al hidrógeno como un competidor a la hora de recibir subvenciones, sino todo lo contrario.
Hay mucho interés empresarial en el desarrollo del hidrógeno, pero ¿existe un volumen suficiente de clientes?
Ese es ahora mismo el cuello de botella. No es la falta de interés, dinero o electrolizadores, está en saber dónde vamos a empezar a utilizar este hidrógeno. Ahora hay tres mercados. El primero son los compradores de hidrógeno fósil: petroleras, químicas, acero... Pronto será uno de los primeros clientes, por la bajada del precio del hidrógeno y la subida del gas natural. El segundo mercado estaría en el transporte, cuyo reto se encuentra en la falta de infraestructura. El tercer mercado, el más lejano, sería convertirse en un sustitutivo del gas natural. Ahora el reto está en cambiar la infraestructura gasista. Parece que el
Banco Europeo del Hidrógeno que anunciaba la presidenta hace unas semanas, dotado con 3.000 millones, está encaminado a primar el consumo ayudando a la operación de los proyectos verdes, pero todo está por definir.
¿Se está quedando retrasada España en el desarrollo de proyectos?
Las cuentas dicen que tendremos que importar hidrógeno renovable hacia el norte de Europa. Esto es bueno para España porque será un exportador neto de hidrógeno verde a los países del norte. Vamos a producir este gas renovable excedente, a un precio competitivo y tenemos una posición estratégica. En cualquier caso, la Unión Europea necesitará importar de fuera. Por ejemplo, el año pasado firmamos un acuerdo de cooperación con la asociación ucraniana del hidrógeno, con la idea de desplegar en el país plantas de producción que pudiesen abastecer a Europa. Ucrania sigue muy interesado y el actual Gobierno incorpora este gas renovable dentro de sus planes de reindustrialización. Además, estos dos últimos años se ha producido un despegue muy fuerte en Latinoamérica, en países como Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Brasil y México. Muchos de ellos son actualmente exportadores de petróleo o de combustibles fósiles pero, empujados por la transición energética de los Estados compradores, podrían convertirse en proveedores de hidrógeno. Eso sí, en el futuro habrá una gran diversificación de productores que garantizarán la independencia de los compradores.
¿Cómo avanza la llegada de industria de electrolizadores a España?
El esfuerzo que se le pide a la industria de electrolizadores es enorme. 10 millones de toneladas anuales de hidrógeno producidas en Europa el año 2030 requiere que instalemos una capacidad de unos 140 GW de electrolizadores en este periodo. Es decir, habría que producir unos 17 GW anuales y la industria europea no está preparada para esto. Ya se han celebrado varias reuniones entre el sector y Bruselas para ver cómo se puede hacer esto de una manera ordenada. La mayoría de fabricantes se están posicionando en España.
¿Las empresas están saliendo al exterior?
Están fuera desde antes de este boom del hidrógeno. Nuestros socios llevan 17 años interesados en el desarrollo de equipos en el exterior y en importar y exportar tecnología. La Asociación Española del Hidrógeno tiene firmados 14 acuerdos bilaterales con otros países: con asociaciones nacionales, Cámaras de Comercio, embajadas o incluso con Gobiernos. Las empresas de España están muy bien posicionadas en el extranjero. Ahora lo que esperamos es contar con el apoyo del Estado.
Acto delegado: “La definición de hidrógeno buscará no fagocitar las energías renovables ya desplegadas”
Electrolizadores: “Habría que producir unos 17 GW anuales y la industria europea no está preparada”