El PSOE plantea que el impuesto a las grandes fortunas sea permanente
Moncloa ‘cuela’ el tributo a los ricos a través de una enmienda a la banca
Como era de prever por parte del principal partido de la oposición, el Gobierno de Pedro Sánchez coló ayer el impuesto temporal de Solidaridad de las Grandes Fortunas –a partir de más de 3 millones de euros-, a través de una enmienda a la proposición de ley para establecer gravámenes a los beneficios de las grandes energéticas y también a la banca.
Pero, más allá de este extraño recorrido normativo mediante proposición de ley para un nuevo impuesto, llama especialmente la atención de la enmienda conjunta de PSOE y Unidas Podemos, que incluya una cláusula por la que se evalúa y valora el tributo, e incluso se contempla que el mismo sea suprimido o se mantenga. Cabe recordar que, en principio, el impuesto de Solidaridad está diseñado para dos años.
Un tributo cuestionado
Se trata de una actuación no exenta de polémica, y que elimina de un plumazo el debate legislativo y la presentación de enmiendas por parte del resto de grupos parlamentarios, ya que, en esencia, es un impuesto nuevo, que debería tener otro procedimiento legislativo.
La decisión de PSOE y de Unidas Podemos de sumar fuerzas para crear una nueva figura tributaria, por la puerta de atrás, coincide con los intereses de socios de investidura, como ERC, quien a cambio dará su apoyo a los PGE.
Pese a los apoyos parlamentarios, los riesgos de ilegalidad del tributo están ahí. Y este fue el aspecto que subrayó este jueves el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, reprobando la falta de discusión parlamentaria y de informes vinculantes”, así como “una enorme inseguridad jurídica”.
En este sentido, el catedrático de Derecho Financiero y Tributario, Fernando Sainz Bujanda, ya defendió que, “pese a que no cabe rechazar el concurso del Decreto-ley para la regulación de la materia tributaria, en la práctica, la prohibición de que afecte al núcleo esencial de los derechos y deberes del Título I de la Constitución reduce considerablemente su virtualidad, ya que no podrá alterar esencialmente el deber de contribuir al sostenimiento de los gastos públicos y, por tanto, tampoco los elementos configuradores del tributo, lo que alcanza a su establecimiento o creación”.
Entretanto, y en defensa de sus competencias fiscales, la Asamblea de Madrid aprobó ayer la ley que blindará su autonomía financiera, la manera por la que el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso pretende resguardar su capacidad tributaria, como es la bonificación de Patrimonio, al tiempo que considera que el tributo a las Grandes Fortunas no deja de ser la armonización fiscal que persigue el Ejecutivo.
Eliminar y homologar
Este jueves, y mediante enmiendas, el PP propuso en el Congreso suprimir el nuevo gravamen a la banca planteado por el Gobierno y reformular el gravamen energético para que sea idéntico al que baraja la Unión Europea. En materia energética, el PP plantea homologar el impuesto español al que propone el reglamento europeo.
La UE plantea un tipo de al menos el 33% sobre los beneficios extraordinarios, calculados como aquellos que excedan en un 20% los obtenidos en ejercicios anteriores, aunque el PP no concreta la cifra en su enmienda, si bien mantiene que no está en contra del gravamen.