La alimentación apuesta por innovar para crear valor en toda la cadena
El sector asegura que los fondos de recuperación Next Generation de la UE “no están llegando”
El sector de la alimentación asegura que la creación de valor de la cadena se consigue a través de la innovación. Esta es la línea general del debate El futuro del Consumo, retos y transformación digital en el marco del II Foro del Retail y el Gran Consumo, celebrado por en colaboración con Aecoc, AMC Group, Calvo, Consum, Danone, Deloitte, Dia, Econocom, Goiko, Inetum, Last.app, McDonald’s, Restaurant Brands Iberia y Tendam.
Álvaro Díaz de Lope Díaz, subdirector general de Dcoop, anunció que “a día de hoy no hemos conseguido articular ningún proyecto”. El directivo aseguró que “hay proyectos” pero que el retraso de los fondos impide llevarlos a cabo. Al mismo tiempo, aseguró que la “dispersión de diferentes autoridades competentes en función de la geografía hace que no se simplifique el trámite” y recalcó que “estamos perdiendo una gran oportunidad”.
Por su parte, la directora de Asuntos Corporativos y Sostenibilidad de Danone Iberia, Laia Mas, habló en la misma línea: “Tenemos proyectos muy necesarios en circularidad, digitalización... y aún no hemos encontrado la forma de conectar”, dijo refiriéndose a las administraciones. En ese aspecto, el director de eBusiness de Pascual, Tomás Pascual, quiso reivindicar la llegada de esos fondos a la pequeña empresa. “Si no están llegando a las grandes empresas imaginaos a las pequeñas”, dijo a sus compañeros de mesa.
Santiago Aliaga, CEO de Zyrcular Foods, habló del papel de las empresas cuando se les solicitaron ideas para ejecutar los fondos: “debe haber bibliotecas y bibliotecas de esas ideas en el Ministerio”. Además manifestó “cierto desánimo” ante esta situación porque “proyectos que pueden generar más soberanía, y pueden argumentar una creación de una cadena de valor a futuro en el sector agroalimentario, se han quedado ahí”, aseveró. Aunque mantuvo el optimismo.
Beneficios extraordinarios
Otro de los temas que se abordaron en la mesa fueron los beneficios extraordinarios a causa de la inflación y la subida de precios. En este sentido, Ignacio García Magarzo aseguró que cuando se habla de beneficios extraordinarios “en nuestro sector es una broma de mal gusto”. Asedas explicó que cuanto más alto es el precio del producto “menos margen de beneficio tenemos”. De hecho, quiso aplicar la pedagogía en su discurso al reiterar que “nosotros tenemos más margen cuanto más bajo es el precio”. Además explicó que, concretamente, en el sector de la producción los beneficios se ven truncados por el precio de la energía.
Por su parte, Santiago Aliaga apoyó la tesis de su compañero de mesa: “no va a haber beneficios extraordinarios, en el retail hay un margen estrecho”.
En el caso del sector primario, Álvaro Díaz de Lope invitó a “hacer autocrítica” para poner el foco en el consumidor. El representante del sector del aceite reiteró que tiene que haber “unidad” en la cadena de valor porque “nosotros vivimos de alguien que elige nuestro producto en un lineal”. Por ese motivo dijo que hay que “generar valor en toda la cadena” y eso “ha sido una cosa pendiente en España durante décadas”, aseguró refiriéndose a la colaboración con todos los agentes.
Pero lo cierto es que el sector afronta la crisis con optimismo. El sentimiento ha sido generalizado en cuanto al corto plazo y así lo manifestó Laia Mas: “En cualquier crisis hay una oportunidad de buscar, estamos en un momento muy convulso pero apasionante”. La directiva animó a “leer esas oportunidades” y reiteró que “saber leer dichas oportunidades es saber reaccionar más rápido, ejecutar y estar cerca del consumidor”.
Por su parte, Ignacio García Magarzo habló en la misma línea de optimismo, pero apuntó que “la situación es compleja”. Magarzo apeló a que esta crisis es diferente porque “tenemos la experiencia de retos pasados” y que “estamos en un momento de cambio que se veía venir, llevamos desde el mes de marzo advirtiendo que se iban a producir cambios” por el incremento de los precios.
Pero, dada la situación actual, ninguno de los ponentes se aventuró a hacer una predicción al largo plazo.
“Lo que está pasando con los fondos genera cierto desánimo porque los proyectos están hechos” Santiago Aliaga CEO de Zyrcular Foods
“Debemos introducir en la mente del consumidor el concepto del valor del producto” Laia Mas Dtra. de Asuntos Corporativos y Sostenibilidad de Danone Iberia.
“No hay una correcta gestión de los recursos hídricos para frenar la desertificación” Álvaro Díaz de Lope Díaz Subdirector general de Dcoop
“La innovación no pasa solo por los productos, también están los procesos y el I+D” Tomás Pascual Director de eBusiness de Pascual
El socio responsable del sector de Consumo & Distribución de Deloitte, Enrique Domínguez, aseguró que “estamos viviendo un shock en la oferta, con la inflación y los tipos de interés que están intentando contenerla”, aunque reiteró que hay factores que “nos hacen ser menos pesimistas” ya que hay previsiones de crecimiento y vaticinó que “en cuanto pase lo peor de la inflación, se recuperará el consumo en los hogares”.
Todos los expertos de esta mesa redonda relacionada con la alimentación estuvieron de acuerdo en que se está produciendo un cambio en el modelo de consumo. Enrique Domínguez reiteró que en el corto plazo “la inflación va a reordenar las prioridades de la cesta de la compra, sobre todo las de los más débiles” en el sentido económico. Por tanto existen varios retos en ese sentido
“Hay muchos factores que nos hacen ser menos pesimistas en el corto y medio plazo en el sector” Enrique Domínguez Socio resp. de Consumo & Distribución de Deloitte
“Estamos en un momento de cambio que se veía venir, lo llevamos advirtiendo desde marzo” Ignacio García Magarzo Director General de Asedas
La inflación está estableciendo cambios en los patrones de compra del consumidor
que la alimentación tiene que abordar para seguir siendo competitivos en los distintos puntos de la cadena de valor.
Digitalización y sostenibilidad
Por otra parte, el sector de la alimentación está afrontando otra serie de retos como son, entre otros, la digitalización. Tomás Pascual, aseguró que “es una de las palancas de eficiencia y de optimización en toda la cadena”. Además, aseveró que esto es, a día de hoy, algo “necesario e imprescindible”.
Por su parte, Ignacio García, estableció que, a pesar de este contexto tan cambiante y de subida de precios “tenemos que hacer el cambio hacia la digitalización y hacia la sostenibilidad”. El directivo calificó esta transición como “una obligación ineludible”, pero advirtió que también supone un “incremento de costes” que requerirá un “enorme esfuerzo inversor” por parte del sector para adaptarse a esos nuevos retos”. Por tanto, apeló a las administraciones públicas para que
estén a la altura del cambio.
Precisamente al sector público apeló Laia Mas. Esta experta en sostenibilidad aseguró que la administración “debe poner un marco desde la ciencia para saber lo que quiere decir ser sostenible y así poder ayudar a la elección de productos sostenibles”.
Aunque hay otros elementos exógenos que suponen un reto para el sector primario en materia de sostenibilidad. El cambio climático y las sequías están afectando profundamente a la producción agrícola del país.
Está claro que el sector de la aceituna, clave en la economía española, es el que más está sufriendo esta serie de fenómenos meteorológicos extremos. Álvaro Díaz contó que esto es “un problema a largo plazo”. Para el representante del sector esto es un inconveniente de “ideología” porque “no se están gestionando correctamente los recursos hídricos del país y lo estamos pagando”, por tanto, es un problema de “mal uso” y no de escasez, aseveró el experto.
Díaz alertó que “todo lo que hemos conseguido estos últimos tres años en materia de consumo y exportación nos lo vamos a cargar si no podemos solucionar el problema de la desertificación del sur de España” y considera que ahí está la clave de la sostenibilidad.
La crisis alimentaria es otro de los temas que abordaron los expertos en la mesa ya que está muy presente en la agenda. De hecho, el martes, los países de la cumbre del G20 abordaron su preocupación ante este tema y han prometido “tomar medidas para promover la seguridad alimentaria y energética y apoyar la estabilidad de los mercados, proporcionando apoyo temporal y específico”, según reza el documento firmado por todos los países asistentes, incluida Rusia, a esta cumbre mundial.
Santia Aliaga arrojó el tema a la mesa de las proteína alternativas a la carne. El CEO de Zyrcular Foods, remarcó que dentro de su estrategia de negocio estaban las proteínas alternativas pero advirtió que “hay que darle una amplitud de miras”. Reiteró que es “una tendencia” pero “no es el mejor momento” ya que ahora “son productos caros” que implican “aguas arriba un riesgo en la oferta” en la cadena de valor.
Aún así, reiteró que “estamos trabajando en proteínas alternativas en mercados estrechos”, es decir, en mercado en crecimiento con productos “caros” en cadenas de valor todavía concentradas en pocas manos “y eso todavía aporta cierta complejidad”.
Por su parte, Enrique Domínguez, apoyó el argumento de Aliaga asegurando que, precisamente, dentro de la innovación de las empresas están estas proteínas alternativas. Aunque el experto aseguró que es algo “que tenemos claro que es para el largo plazo” ya que en el futuro habrá que “alimentar a 10.000 millones de personas”. Por tanto, apuntó, “va a ser algo absolutamente necesario” pero contando con todos los componentes de la cadena de valor y “ya no verlo como algo sustitutivo si no como algo complementario” a las actuales industrias alimentarias.
El precio
Está claro que dentro de la cadena de valor de los alimentos, el cómo llega el producto al consumidor final y a qué precio es muy importante. Laia Mas apuntó que hay que introducir dentro de la mente del consumidor el concepto de “valor”.
La directiva apuntó que lo que hay que hacer por parte de los productores es “trasladar el valor de toda la cadena porque, si no hay valor, al final todo se reduce a una ecuación numérica” y por eso animó a que todo el sector “aunemos esfuerzos para trabajar en ese punto y realmente educar en el valor de ese alimento”.
En este campo de la creación de valor también entra el concepto de innovación a través de la creación de productos y la diversificación. El director de eBusiness de Pascual, Tomás Pascual, habló desde su experiencia dentro de la compañía y contó que la “innovación es intrínseca”. Pascual contó que para llevar a cabo esto “nos adaptamos a la situación económica, la del mercado, la de las nuevas tendencias, las nuevas tecnologías...”.
Pero el campo de la innovación no solo implica la creación de nuevos productos. Algo que aconsejó este directivo es que también hay que innovar “en procesos, en I+D...” y, sobre todo, incorporar la tecnología a toda la cadena de valor “desde el ganadero hasta el producto final”. Pascual habló de los datos como manera de aportar valor: “los datos nos ayudan, por ejemplo, a definir hábitos de consumo y nos ayuda a que adaptemos mucho mejor toda esa innovación y lanzar productos mucho más adaptados a sus necesidades”.
En definitiva, el sector se muestra optimista ante los retos a corto y medio plazo, con la vista puesta en continuar contando con la confianza del consumidor a través del aporte de valor.