La vasca instalará su primera planta fotovoltaica flotante en Brasil
Iberdrola instalará en Brasil su primera planta fotovoltaica flotante a nivel mundial. La intención de la compañía es construir el proyecto –a través de su filial en el país Neoenergia- sobre la lámina de agua de la presa de Xaréu, en la isla de Fernando de Noronha, reconocida por la Unesco como Patrimonio Mundial Natural.
Llevará a cabo el proyecto de la mano de la Companhia Pernambucana de Saneamiento (Compesa), que opera la red de distribución de agua y alcantarillado en toda la isla, y con el apoyo del Programa de Eficiencia Energética regulado por la Agencia Nacional de Energía Eléctrica de Brasil (Aneel).
Hablamos de una planta conformada de unos 940 paneles solares, con una potencia total de 630 kilovatios (kW), lo que permitirá generar unos 1.240 megavatios hora (MWh) anuales de energía verde. Esto equivale a la cobertura de más de la mitad del consumo energético de Compesa en la isla.
Su construcción supondrá una inversión de dos millones y su inicio está previsto para antes de que finalice 2023. Además, evitará la emisión de más de 1.660 toneladas de CO2. Según apunta la compañía en un comunicado, su desarrollo le permitirá probar esta nueva tecnología y analizar su posible expansión.
España también está avanzando en este sentido. De hecho, en octubre el Consejo Nacional del Agua refrendó la instalación de plantas fotovoltaicas flotantes en embalses de dominio público hidráulico. Una vez sea aprobado por el Consejo de Ministros, la norma permitirá el aprovechamiento de la energía solar en los embalses públicos y privados aptos para tal fin.