¿Desmadre a la americana? Niveles clave a batir para soñar
Las últimas subidas han llevado al EuroStoxx 50 a superar los máximos de diciembre en los 4.035 y, en lo que es más importante, a batir la resistencia clave de los 4.050. La ruptura de la mismna es muy importante ya que nos advierte de que los mínimos del pasado octubre en 3.250 no han sido solo un suelo de medio plazo, sino también de largo. De hecho, dudo que en próximos meses esos mínimos vayan a ser perdidos. Otra cosa que nos indica la ruptura de los 4.050 es que lo más probable es que las bolsas europeas acaben yendo a buscar los máximos del año pasado, que fueron el origen de la última corrección, que se encuentran en los 4.420 del EuroStoxx 50. Les hablo de un recorrido adicional del 7% y el alcance de estas resistencias lo vería a priori como una oportunidad para recoger parcialmente beneficios y para disminuir la exposición que tengan a bolsa ya que dudo que estas resistencias puedan ser superadas a las primeras de cambio en pleno inicio de temporada de resultados en Wall Street, salvo que haya un desmadre a la americana.
Queda mucho año por delante y no descarto que estemos ante un magnífico año de Bolsa, que se cierre con subidas de doble dígito, pero todo a su debido tiempo. Controlar los tempos es vital para no llevarse sustos y a día de hoy todavía falta que Wall Street consiga batir resistencias para que todo encaje en ese puzle alcista. Mi optimismo aumentaría sobremanera si al otro lado del Atlántico el S&P 500 y el Nasdaq 100 logran romper las directrices bajistas que vienen acotando milimétricamente las caídas desde hace algo más de un año, para lo cual deben batir los 4.100 y los 12.170 puntos respectivamente. Si eso sucede sería partidario de seguir aumentando la exposición a bolsa ya que podríamos estar delante de un desmadre que habría que aprovechar antes de que vuelvan las curvas, que vendrán...