Goirigolzarri sale en defensa de Juan Roig y pide ser “cuidadoso” con el mercado hipotecario
Pide mirar la cuenta a largo plazo porque los tipos aflorarán impagos y frenarán el negocio
La presentación de resultados de CaixaBank, en medio de las acusaciones de distintos miembros del Gobierno a la banca, obligó a José Ignacio Goirigolzarri a pronuciarse sobre los ataques al empresariado, las ganancias récord de las entides o la idoneidad del impuestazo y lo hizo en líneas similares a sus homólogos en BBVA, Carlos Torres, y en Santander, Ana Botín.
Goirigolzarri salió en defensa del empresario con un cerrado apoyo y elogio Juan Roig, fundador y primer ejecutivo de Mercadona. “Roig y todos los empresarios tienen un mérito extraordinario”, reivindicó, ensalzando que las dos empresas “más exitosas” del país se encuentren en el sector de la distribución y textil, cuando era impensable hace dos décadas. Su defensa a Roig tiene lugar después de que la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, atacase al empresario por aprovecharse de la crisis para “hacerse de oro” y “llenarse los bolsillos”. La ministra, que también tachó de “impúdicos” los resultados bancarios, atizó en ese mismo discurso a Ana Botín y al presidente de ACS, Florentino Pérez.
Goirigolzarri recordó que detrás de Mercadona está Juan Roig, una empresa con un desempeño “extraordinario” en los últimos 20-40 años, y que “es el mayor empleador” del país. Goirigolzarri, que está al frente precisamente del banco donde el Estado tiene un 16% a través del Frob, defendió que todos los empresarios son además cruciales para la actividad en el país, el empleo y el desempeño económico.
Sobre la ofensiva directa a los bancos por sus cuentas y a los banqueros por sus sueldos, proferidas desde el mismo presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a varios miembros del Consejo de Ministros para justificar la nueva tasas a la banca, apuntó que todas las críticas pueden servir para hacer una reflexión pero negó la mayor sobre resultados extraordinarios.
CaixaBank logró una rentabilidad del 9,8% el pasado año, que tachó de insuficiente. “Todavía este RoTE está por debajo del coste de capital”, dijo y conminó a mirar las cuentas a largo plazo porque, aunque la subida de tipos eleva el margen a corto plazo, el coste en provisiones y por la inflación mermará la cifra por el frenazo inducido en la economía para atajar la inflación. El consejero delegado del banco, Gonzalo Gortázar, aseguró que la mejora de la cuenta de CaixaBank se produce por el aumento de la actividad y el ahorro de costes conseguido por las sinergias de la fusión, y no tanto por la subida del euríbor.
No quisieron entrar a contestar la afirmación de la vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, de que los resultados confirman lo adecuado del nuevo impuesto. A CaixaBank le costará 400 millones, y aún debe analizar si lo impugna. Pero donde sí fue claro y contundente es sobre la petición de la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, de topar la subida de precios en hipotecas variables. Goirigolzarri pidió “ser muy cuidadosos en cualquier modificación” que se quiera plantear en un mercado hipotecario que da acceso a la vivienda al 76% de la población.