Pingo Doce, Aldi y Lild entran en la puja por las tiendas de Dia en Portugal
A falta de ofertas por toda la red, hay interés por determinados paquetes
Dia avanza con paso firme en la venta de sus 494 tiendas en Portugal, un proceso para el que ha contratado como asesor al banco francés Societé Générale. Fuentes financieras próximas al proceso han confirmado que, a pesar de la falta de una oferta por la totalidad de la red, sí que ha habido varias cadenas que han mostrado su interés en quedarse con determinados paquetes de tiendas. Es el caso, según estas fuentes, de la cadena Pingo Doce, propiedad del grupo portugués Jerónimo Martins y de la holandesa Ahold Delhaize y de las alemanas Lidl y Aldi, que están experimentando un fuerte crecimiento en España y que quieren acelerar también a partir de ahora su expansión en el país vecino.
Dia, que opera en Portugal con la marca Minipreço aumento de ventas netas un 0,5% el año pasado, hasta alcanzar los 596 millones de euros, tras haber visto se reducía su red de tiendas en un 7%. La filial portuguesa cerró el último ejercicio con unas pérdidas de 20 millones de euros, ligeramente por encima de los 19,4 millones que había perdido un año antes.
Mayor competencia
La empresa reconoce que “la entrada de nuevos actores en el mercado, así como la fuerte inversión y expansión de los concurrentes, han supuesto un escenario retador para Dia, que junto con la situación inflacionaria vivida en el país, han puesto presión en los márgenes y la rentabilidad del negocio”. Dia cerró en Portugal con un ebitda (resultado bruto operativo) de 10,5 millones de euros, 1,4 millones de euros menos que en 2021, con una caída de 0,2 puntos porcentuales en su margen Esta caída se debe en parte, según el grupo, “a la política de precios competitivos mantenida durante el año y al incremento de los gastos de suministros, mantenimiento y energía”.
Desinversiones
En esta misma línea de desinversiones, la compañía materializó ya a finales del año pasado la venta de su filial Beauty by Dia, que operaba la red de 1.015 tiendas de productos de belleza Clarel, por un total de 60 millones de euros al fondo C2 Private Capital. Esta operación estuvo precedida además el pasado verano por el traspaso a Auchan, propietaria de Alcampo, de 235 supermercados de gran formato, un movimiento valorado en 267 millones de euros. En total, la red de establecimientos de la que se desprendió Dia el año pasado sumaron unas ventas netas de 761,5 millones de euros.
“Estas dos decisiones están alineadas con nuestra estrategia de proximidad y permiten a Dia centrarse en el core de su negocio, la distribución alimentaria, y mantener su foco en lo que hace bien: ser la tienda de barrio en la que el cliente puede hacer una compra completa, fácil y rápida, con productos frescos y una marca Dia de gran calidad a precios asequibles”, apuntó Martín Tolcachir, consejero delegado global de Grupo Dia, tras la presentación de resultados del año pasado.
Dia no hace ahora mismo ninguna valoración al respecto del proceso de venta en Portugal. Según dijo ya tras conocerse su intención de desprenderse del negocio luso, “el grupo valora continuamente diversas oportunidades de inversión y desinversión, sin que a esta fecha se haya tomado ninguna decisión al respecto”.
Dia aumentó sus ventas un 0,5% en Portugal el año pasado, pero perdió 20 millones
y Brandes Investment Partners (3,002%). Buena parte de estos fondos han aflorado sus participaciones de forma reciente. El movimiento tiene lugar con la cotización en horas bajas –ayer cerró en 0,82 euros frente a los 1,3175 euros de su debut bursátil hace dos años– por el complicado momento que vive el seguro de autos. Línea Directa entró, precisamente, en pérdidas en el primer trimestre, con 5,3 millones de números rojos, por el fuerte aumento en costes que está soportando el sector. La compañía ha puesto en marcha un plan de eficiencia y adaptará el precio de las pólizas a cada cliente para lidiar con esta compleja situación.