Renfe aplaza a 2024 la llegada a París por la burocracia gala
Esperaba comenzar a operar en la capital francesa a finales de 2023, pero retrasa el estreno a “antes de los Juegos”
La llegada de los trenes de Renfe a París se retrasará al menos hasta entrado 2024. El mismo día en el que el operador ferroviario presentó sus conexiones hasta Lyon y Marsella, tuvo que aplazar de nuevo su entrada en la capital francesa por la falta de los permisos de seguridad necesarios. La compañía pública no puso una fecha concreta, pero sí manifestó que “sueña” con comenzar a trabajar antes de los Juegos Olímpicos del próximo verano.
El presidente de Renfe, Raül Blanco, explicó este lunes que la empresa trabaja con el objetivo de operar ya durante la cita olímpica. Para ello, debe lograr todavía el certificado de seguridad para el tramo entre Lyon y París –en Francia los permisos van por línea–. Defendió que no existía ningún problema. “Hay que cumplir con todos los requisitos, se está trabajando”, dijo.
No obstante, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, celebró el pasado mes de enero, en la cumbre Hispano-Francesa de Barcelona, que la alta velocidad española llegaría a París antes de terminar 2023. Finalmente, no será así.
“Se trata de un proceso complejo; va más lento de lo que hubiésemos querido”, añadió Blanco. Y remató: “España tiende a ser un país muy abierto –los trenes de Ouigo hace años que circulan–, lo hemos visto con las telecomunicaciones y la energía. La competencia es buena; espero que el resto de los países aplique el mismo baremo”.
La empresa sí tiene fecha definitiva para las líneas Barcelona-Lyon y Madrid-Marsella. La primera arrancará el 13 de julio y la segunda el día 28. Los billetes se pondrán a la venta el 21 de junio. Arrancará con precios agresivos, de 9 euros por trayecto en los viajes internos en Francia, de 19 euros para las conexiones entre España y Montpellier y Narbona; y de 29 euros para las rutas completas.