Gescobro se convierte en GCBE tras entrar en deuda de pymes e hipotecas
La filial de Cerberus acelera y crecerá un 20% este año en activos bajo gestión
Gescobro Collection Services, controlada por el fondo Cerberus, muta su denominación a GCBE Advanced Solutions para reflejar la transformación y evolución de la compañía, que ha pasado de gestionar y recuperar deuda exclusivamente ligada al crédito al consumo en su origen a expandir la operativa a financiación con pymes e hipotecaria. Acuña la nueva identidad corporativa en un momento de aceleración en el crecimiento y tras poner un foco claro en la digitalización para maximizar la operativa.
Fundada como empresa familiar en 1980, su génesis es de una firma de recobro para bancos clientes en financiación con impagos y sin garantías. Por entonces, la tramitación de los expedientes y todo el proceso recuperatorio era en papel y complemente manual. Cuando estalla la crisis financiera, en 2008, y la banca tiene la necesidad de desalojar activos improductivos gana dimensión y en 2010 toma su control accionarial la firma de capital riesgo Miura Private Equity, que le dio un primer impulso de profesionalización. En el arranque de 2015, el fondo estadounidense Cerberus adquiere a Miura su participación. Gescobro contaba en ese momento con una plantilla de 300 profesionales y gestionaba expedientes por valor de 4.000 millones.
Desde entonces la firma de gestión y recuperación de deuda liderada por Íñigo Mato ha dado un gran empuje con una fuerte inversión en recursos humanos y técnicos, adoptando plataformas que le permiten eficientar y agilizar los procesos, incluso, automatizando respuestas con la inteligencia artificial. Su empuje ha ido también de la mano de la diversificación del negocio, incorporando la prestación de servicios para deuda con pymes e hipotecaria.
La nueva marca busca reflejar la realidad y dimensión actual del proyecto y sus capacidades, y recoge en GCBE las iniciales silábicas de GesCoBro y añade una “E” de “expertos” en dar soluciones a clientes.
Con oficinas en Madrid y Barcelona y una plantilla cercana a los 600 expertos, al cierre del pasado año contaba bajo gestión con activos por valor de unos 15.000 millones de euros, propiedad en su mayoría de clientes (trabaja con casi todos los bancos y otros clientes como operadores de telefonía o firmas de energía, además de para Cerberus). Dicho volumen implica un aumento interanual próximo al 10%, que este año podría duplicar y alcanzar los 18.000 millones.
Solo durante los primeros compases del ejercicio se ha adjudicado una cartera de alrededor de 800 millones que formaba parte del Proyecto Spirit enajenado por el Santander (Axactor adquiriró el resto del porfolio,
Arrancó el año con 15.000 millones bajo gestión y compró carteras a Santander y a Bankinter
cuyo valor nominal total ascendía a 1.100 millones). También ha adquirido a Bankinter otra cartera de su financiera y Relanza Gestión, filial de gestión y cobro de impagados del banco, operación que lleva además asociado un contrato de prestación de servicios a largo plazo. De la cartera actual gestionada un 10%15% son activos con garantía hipotecaria y el 55%-60% corresponde a deuda con pymes.