Bruselas cede y retira la ley para reducir el uso de pesticidas químicos
La norma preveía un recorte del 50% en el uso de esos productos hasta 2030
Los agricultores prosiguen con sus protestas en las principales capitales europeas. Pese al acuerdo alcanzado en Francia, los reclamos del sector agrario por la situación económica se trasladan a movilizaciones en las calles. Bruselas reacciona y da marcha atrás en su intención de reducir el uso de pesticidas químicos. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, retiró ayer la propuesta para reducir el uso de pesticidas, herbicidas e insecticidas químicos que se usan en la UE antes de 2030.
El Ejecutivo comunitario propuso reducir los riesgos de los productos químicos utilizados en la agricultura, sin embargo, tal propuesta se ha “convertido en un símbolo de polarización”, dijo la alemana en el pleno del Parlamento Europeo en Estrasburgo. Tras el rechazo en el Eurocámara y la falta de avances entre los Veintisiete Estados miembro, von der Leyen anunció que propondrá al Colegio de Comisarios retirar esta propuesta. Sin embargo, el tema, y la visión tras él, se mantendrá.
“Para avanzar, es necesario más diálogo y una nueva perspectiva”, juzgó la jefa de la Comisión Europea. La idea es, no obstante, que el Ejecutivo comunitario haga una nueva propuesta con un contenido más “maduro” y con la “participación de las partes implicadas”. Es decir, implicar al sector agrícola en la elaboración de esta normativa para que incluya objetivos vinculantes que no susciten recelo.
La propuesta de Bruselas incluía un recorte del 50% el uso de pesticidas químicos y el uso de pesticidas más peligrosos hasta 2030. La medida, que fue rechazada por el sector agrícola, había encallado en su proceso legislativo en las instituciones comunitarias. Si los Veintisiete criticaban la falta de una evaluación de impacto considerando los efectos de la guerra de Ucrania sobre productos como los fertilizantes, el pleno de la Eurocámara, con mayoría de conservadores, manifestó su rechazo.
La presidenta de la Comisión Europea, que se reunió el pasado jueves con la agrupación de cooperativas agrícolas europeas Copa-Cogeca, consideró que el sector agrícola comunitario necesita una perspectiva a largo plazo. “Es cierto que deben ser remunerados de forma justa”, indicó Von der Leyen que recordó que la Política Agraria Común cuenta con un amplio apoyo del presupuesto de la UE. “El dinero es importante, pero no lo es todo, los recursos naturales sanos son también clave para mantener altos rendimientos y suelos fértiles”.
La jefa del Ejecutivo comunitario consideró que la protección de naturaleza debe ofrecer incentivos “generosos” y que los agricultores necesitan incentivos “convincentes” para mejorar las condiciones del entorno natural. “Las ayudas públicas pueden ayudar a establecer tales incentivos”, aseguró y puso como ejemplo el etiquetado premium. En todo caso, su perspectiva
Defiende que la protección de la naturaleza debe ofrecer incentivos a los agricultores
se apoya en que la conservación de la naturaleza solo puede tener éxito a través de alicientes económicos: “Sólo si nuestros agricultores pueden vivir de sus tierras invertirán en ella en el futuro”. Von der Leyen defendió que esta industria debe llegar a una fórmula de producción más sostenible para que, en los próximos años, siga siendo rentable.