Stadler Valencia hará 33 locomotoras para la ‘Renfe’ neozelandesa
La filial española del fabricante ferroviario suizo Stadler ha conseguido hacerse un hueco en la ambiciosa inversión de KiwiRail, el operador público de Nueva Zelanda, para renovar su flota. La compañía ferroviaria, que prevé destinar 1.700 millones de dólares (1.550 millones de euros) en material rodante, ha firmado dos nuevos contratos con Stadler Rail Valencia para el suministro de 33 nuevas locomotoras, además de sus repuestos y otros servicios.
El nuevo pedido, cuyo importe no ha sido cuantificado, se suma al que ya realizó KiwiRail en 2021 y que incluía la adquisición de un total de 57 nuevas locomotoras por un valor total de 228 millones de euros.
El primero de los nuevos contratos consiste en la entrega de nueve locomotoras de línea equipadas con ETCS (European Train
Control System) para operar en la Isla Norte de ese país. El acuerdo también contempla que las últimas de las diez locomotoras en línea incluidas en el pedido de 2021 se equipen también con estos sistemas de seguridad con los estándares europeos, ya que es con el que está equipado el área metropolitana de Auckland y también es el que se instalará en el área metropolitana de Wellington.
El segundo acuerdo incluye el suministro de 24 locomotoras de maniobras, de vía estrecha, híbridas diésel-baterías, que cuentan con una cabina central y una carga por eje máxima de 16 toneladas. Esas máquinas están diseñadas específicamente para funcionar dentro de todas las terminales de KiwiRail. Gracias a las baterías eléctricas, las locomotoras fabricadas en la planta valenciana de Albuixech funcionarán prioritariamente como un vehículo cero emisiones