MÁS DE LA MITAD DE LOS HUMEDALES EN ESPAÑA, EN RIESGO DE MORIR DE SED
En los últimos 20 años se ha multiplicado por cuatro la cantidad de agua subterránea empleada para uso agrícola. En España el regadío consume el 80% del agua de las cuencas hidrográficas
España tiene aproximadamente 5.000 humedales, superficies de tierra que se inundan de manera permanente o intermitente. Una cantidad que ha ido variando mucho a lo largo de los años. Sobre todo, si se tiene en cuenta que entre las décadas de los 60 y los 70 desaparecieron entre el 60% y 70%. Pese a que la situación empezó a mejorar en los 80, el camino por recorrer es todavía muy largo.
Tanto, que más de la mitad de los humedales en España, el 54%, se encuentra en una situación crítica, según recoge el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) en su informe
Situación actual y perspectivas de conservación y restauración de los humedales españoles hasta 2030. En concreto, el 24% se encuentra en estado pobre y otro 30% en estado muy pobre. Esto significa que solo el 12% de los sitios están bien conservados y otro 15% en estado moderado. Además, hay un 19% que está todavía está en evaluación.
Una situación que es incluso más dramática si se atiende las denuncias de Fundación Global Nature. La entidad asegura que el inventario nacional tiene todavía muchas carencias y recoge, como mucho, dos de cada diez humedales. Según los últimos datos oficiales recogidos por el Miteco, este inventario está compuesto por un total de 871 humedales mientras que si se tiene en cuenta los que no recoge el registro oficial ascenderían hasta los 5.000.
La recuperación de los humedales constituye un objetivo prioritario de las políticas europeas de biodiversidad. La Estrategia 2030 de la Unión Europea sobre la Biodiversidad, aprobada en mayo de 2020, establece la obligación de que los países europeos mejoren al menos el 30% de los hábitats y especies en peor estado de conservación, entre los que se incluyen los humedales.
Con el propósito de cumplir esta meta, el departamento que capitanea Teresa Ribera está trabajando en el Plan Estratégico de Conservación del Patrimonio Natural y la Biodiversidad y en el Plan Estratégico para la Conservación y el Uso Sostenible de los Humedales 2022-2030. El objetivo para 2025 es que los humedales que actualmente se encuentran incluidos en la lista de humedales amenazados, Doñana y las Tablas de Daimel, la hayan abandonado. Para ello, en ambos parques se seguirá reforzando el control de la explotación de agua de los acuíferos, combatiendo las extracciones ilegales o incluso acudiendo a actuaciones de urgencia para elevar temporalmente los niveles freáticos. Principales amenazas
Pero, ¿qué está matando de sed a los humedales españoles? La agricultura intensiva, cambios en los usos del suelo incluidas modificaciones ilegales, infraestructuras eléctricas o turismo masivo son las principales causas que están provocando su degradación.
Tanto la Fundación Global Nature como el Miteco han denunciado en más de una ocasión que el sector agrícola está implicado en las principales presiones identificadas, incluidos los cambios en el uso del suelo, la extracción excesiva de agua subterránea y su contaminación, especialmente con los nitratos procedentes de los fertilizantes y los purines. “Durante el periodo estival, se laborean las orillas y los lechos lagunares secos de pequeños humedales temporales, identificados en el SIGPAC como superficie no agrícola, pero integrados en parcelas mayores dedicadas al cultivo de secano. Tras dicho laboreo, los titulares de esos terrenos solicitan la incorporación de la nueva zona labrada al resto de la parcela que la engloba. El SIGPAC realiza la correspondiente comprobación mediante fotointerpretación, por lo que si la imagen ha sido tomada en verano resulta muy probable que se detecte una zona seca que ha sido labrada. En consecuencia, se modifica el uso anterior pasando a constituirse como tierra arable”, denuncia el Plan Estratégico de Humedales a 2030.
Además, hay que tener en cuenta que en las últimas décadas no ha dejado de crecer la superficie de regadío. En menos de 20 años se ha multiplicado por cuatro la cantidad de agua subterránea empleada para uso agrícola. Este método consume el 80% del agua de las cuencas hidrográficas.
Solo dos de cada diez humedales están incluidos en los registros oficiales de España
El sector agrícola es uno de los principales causantes de la situación de los humedales