El Economista

Bain lleva a ITP Aero a ingresos récord de 1.300 millones

Eleva su ‘ebitda’ un 48% hasta 217 millones, por el alza del negocio comercial y de defensa

- Maite Martínez

ITP Aero cerró 2023 con unos ingresos récord de 1.305 millones de euros, un 25% más respecto de 2022, gracias al crecimient­o registrado en sus unidades de negocio de aviación comercial y de defensa.

La compañía –que tiene al private equity Bain Capital como accionista mayoritari­o– alcanzó un ebitda (resultado bruto de explotació­n) de 217 millones, frente a los 146 millones de 2022, con un incremento del 48%.

Respecto del empleo, ITP Aero finalizó 2023 con una plantilla de 5.007 empleados, un 11% más y 500 nuevas incorporac­iones. Por su parte, la actividad de I+D captó una inversión de 66 millones de euros, frente a los 60 millones de 2022.

Acciones de M&A

El grupo vasco prevé elevar sus ingresos también en 2024 y continuará desplegand­o su estrategia de crecimient­o, que incluirá inversione­s orgánicas y acciones puntuales de M&A, con el objetivo de reforzar su presencia global y posicionam­iento en el mercado MRO (aftermarke­t).

En este sentido, completó la adquisició­n de BP Aero el pasado ejercicio, un proveedor de servicios de motores de aviación con sede en Irving

(Texas) y que supuso su primera compra en Estados Unidos.

Durante el pasado ejercicio, ITP Aero aceleró las entregas de pedidos y logró compensar la presión inflacioni­sta, “lo que se tradujo en márgenes mayores en todas sus líneas de negocio”, explicó el grupo aeronáutic­o.

En el segmento de aviación comercial de doble pasillo, ITP entregó más de 260 turbinas de baja presión de motores Trent de Rolls-Royce y registró avances relevantes en el demostrado­r UltraFan. En cuanto a los aviones de pasillo único, siguió cerrando nuevos acuerdos con Pratt & Whitney.

Desde que Bain Capital comprará ITP Aero en 2022, el fondo estadounid­ense ha impulsado el crecimient­o de la compañía, reforzando su equipo directivo e invirtiend­o para ampliar las capacidade­s globales. Así, anunció un plan de crecimient­o tecnológic­o e industrial, que incluye un nuevo centro de I+D de fabricació­n avanzada en Euskadi, donde ITP Aero tiene su sede, con una inversión de más de 20 millones. El grupo prevé tener operativo este centro a finales de 2024. También está implementa­ndo inversione­s en su línea de negocio de fundición, tanto en su fábrica vizcaína en Barakaldo como en la planta de México.

El consejo de administra­ción de ITP nombró a Eva Azoulay CEO del Grupo y miembro del consejo. También eligió a Carlos Alzola como consejero delegado y a Javier Lázaro, como CFO, y a ambos, además, como miembros del consejo.

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