La deuda de hogares y empresas baja a su menor nivel desde 2001
El endeudamiento cae hasta el 46,9% del PIB mientras sube su riqueza neta
En 2023, tanto los hogares como las empresas en España redujeron su deuda en 30.200 millones de euros debido a los altos tipos de interés. Esta disminución llevó a que la deuda consolidada de estos sectores se redujera casi doce puntos hasta el 111,6% del PIB, su nivel más bajo desde 2002, cuando los tipos de interés alcanzaron máximos desde la creación del euro.
Tanto familias como empresas se esforzaron considerablemente para reducir su nivel de deuda y enfrentar mejor las dificultades causadas por ese aumento de los tipos de interés y el consiguiente aumento en el costo de los préstamos. Las últimas cifras de las Cuentas Financieras de la Economía Española, publicadas ayer por el Banco de España, muestran que el endeudamiento de las empresas ha disminuido en 11.900 millones de euros en el último año, situándose en el 64,7% del PIB, en comparación con el 71,2% del año anterior. Al mismo tiempo, la deuda de los hogares también ha bajado en 18.300 millones de euros, pasando de 703.600 millones en diciembre de 2022 a 685.400 millones en diciembre de 2023, lo que ha llevado a una reducción de su ratio sobre el PIB al 46,9%, frente al 52,3% del año anterior. Además, el aumento del empleo y la mejora del poder adquisitivo, debido a la moderación en el aumento de los precios, han permitido que los hogares también reduzcan su deuda mientras continuaban consumiendo. Este fue uno de los factores que impulsaron el crecimiento del PIB por encima de las expectativas, alcanzando el 2,5% en el año pasado.
La deuda consolidada de las sociedades no financieras se redujo de 958.400 millones en el cuarto trimestre de 2022 a 946.600 millones en diciembre de 2023. En términos del PIB, esta ratio descendió de 71,2% a 64,7%, marcando su nivel más bajo desde septiembre de 2002. Si se incluyese la deuda interempresarial, la ratio en diciembre de 2023 sería del 81,7%, en comparación con el 92,2% del año anterior.
Si solo se atiende al sector privado, se observa que el año pasado, la deuda total disminuyó tres veces más que la del Estado. Esta reducción en la deuda privada, que totalizó 1,632 billones de euros al término del año, representando una disminución del 1,8%, sigue un patrón que ha sido habitual desde la crisis económica previa.
Riqueza neta
Según el Banco de España, la riqueza financiera neta de las familias españolas e instituciones sin fines de lucro al servicio de los hogares (Isflsh) alcanzó los 2,09 billones de euros al cierre de 2023, lo que representa un aumento del 9,3% en comparación con el año anterior. Esto coincide con una moderación en la deuda de los hogares, que se situó en el 46,9% del PIB, un nivel no visto desde septiembre de 2001.
Los activos financieros netos de las familias al final del cuarto trimestre equivalían al 142,8% del PIB, un aumento de nueve décimas respecto al año anterior. En total, los activos financieros de los hogares e Isflsh alcanzaron los 2,83 billones de euros en 2023, mostrando un incremento del 6% respecto al año anterior.
En términos de distribución de los activos financieros al final del período, la mayor parte de los activos financieros de los hogares se mantuvo en efectivo y depósitos, representando el 38% del total. Le siguen las participaciones en el capital con un 30%, participaciones en fondos de inversión con un 15%, y seguros y fondos de pensiones con un 13%. Destaca que las participaciones en fondos de inversión fueron el componente que más aumentó su peso en los activos financieros de los hogares, incrementándose en 1,1 puntos porcentuales en comparación con el año anterior debido a su revalorización, mientras que el peso del efectivo y los depósitos disminuyó en 2,7 puntos porcentuales.
La cifra de los activos financieros netos de las familias a cierre del cuarto trimestre equivale al 142,8% del PIB, ratio que fue nueve décimas mayores a la de un año antes.
Este aumento en las participaciones en fondos de inversión se debió a una revalorización de 119.800 millones de euros, así como a una adquisición neta de activos financieros por un valor de 39.300 millones de euros durante el año.