Los depósitos que aún superan el interés de las letras
Las letras se han convertido en uno de los refugios favoritos de los ahorradores más conservadores, pero sus rentabilidades han empezado a bajar ante la posibilidad de que los bancos centrales den el pistoletazo de salida a los recortes de tipos en junio. Esta semana, el Tesoro Público ha desembolsado un tipo de interés medio del 3,62% por las letras a seis meses, y del 3,42% en las letras a un año. En ambos casos es menos de lo ofrecido en subastas anteriores. Para ese perfil de ahorrador, todavía existe la opción de amarrar depósitos que pagan rentabilidades superiores a la de las letras.
A seis meses, Banco BiG mantiene en su escaparate un plazo fijo que ofrece un interés del 4,1% para importes mínimos de 10.000 euros (la cantidad que se necesita para comprar una letra es inferior, eso sí, de 1.000 euros). Hay dos depósitos más que baten ese 3,62% que ofrecen las letras a seis meses, pero el plazo es distinto. Banco Cetelem comercializa un depósito a tres meses con una rentabilidad del 4%, sin importe mínimo de contratación; y BFF mantiene otro a tres meses también que paga un 3,8% a partir de 5.000 euros. Ya no hay más depósitos contratables directamente en España que superen la rentabilidad de las letras a seis meses.
Sí hay opciones que superan el interés ofrecido por las letras a un año, pero también a plazos fijos distintos a esos doce meses (ver gráfico). A doce meses, el depósito que ofrece una rentabilidad más elevada vuelve a ser el de Banco Finantia, que en contra de la tendencia actual de reducir la remuneración de estos productos ha vuelto a incrementarla hasta el 3,25% desde el 3,15% que ofrecía hace una semana. Con este movimiento, el depósito de Banco Cetelem a doce meses al 3,2% pasa a situarse en segundo lugar. Miralta Bank también paga un 3,25% a un año, pero su contratación se hace a través de la plataforma Raisin, que da acceso a depósitos y cuentas de ahorro de bancos europeos. Aunque en el caso del depósito de Miralta Bank está adherido al Fondo de Garantía de Depósitos español, que en la práctica funciona igual que el de cualquier otro país europeo. Garantiza los primeros 100.000 euros depositados en caso de quiebra de la entidad.