De Cos avisa que las alzas rápidas del SMI y reducir la jornada dañan el empleo
El Banco de España revisará al alza el crecimiento del PIB de 2024 a más del 1,9%
El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, advirtió ayer, en su última comparecencia de su mandato en la Comisión de Economía del Congreso, de los “peligros” que pueden suponer para el mercado de trabajo las subidas demasiado rápidas del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas sin tner en cuenta las peculiaridades de cada sector.
En concreto, el gobernador aseguró en sede parlamentaria que las siguientes subidas del SMI, que ya se sitúa por encima del 60% de la renta media, “tienen que ser más cautelosas” y hacerse con “perspectiva regional”. De Cos reconoció, no obstante, que en las anteriores cinco subidas “el efecto negativo ha sido relativamente reducido”.
Aun así, reiteró que el incremento del SMI de manera poco controlada “puede generar efectos negativos en el empleo”, sobre todo en el colectivo de los más jóvenes y de los trabajadores de 50 a 55 años.
Al mismo tiempo, también mencionó la heterogeneidad que existe con respecto a las diferentes comunidades autónomas y provincias en términos reales. Por tanto, en aquellos lugares donde se sitúa por encima de la media, la subida del SMI haría que aumentase el riesgo de efectos negativos para el empleo “si no se produce en paralelo con el incremento de la productividad”.
En esta misma línea habló de la reducción de la jornada laboral. De Cos advirtió de los riesgos que tiene hacer una bajada homogénea sin tener en cuenta las peculiaridades de cada sector. “Hay que tener en cuenta que avanzar en su reducción sin contempla ni la heterogeneidad entre distintos tipos de empresas y sectores ni las ganancias de productividad, que son las que permiten finalmente aumentos salariales y reducciones de la jornada laboral, conllevaría riegos para el crecimiento del empleo”. Así, el gobernador apuesta por revisiones sectoriales mediante la negociación colectiva a través de los convenios.
La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, fue preguntada ayer en La Sexta por estas declaraciones y aseguró que en conversaciones privadas con De Cos, éste le manifestó que estaba conforme con la reducción de jornada “que lleva 40 años paralizada”, dijo, aunque entiende que “es un tema sensible” y que habrá que analizar cómo poner en marcha dicha reducción por sectores económicos. “Estamos de acuerdo en algo fundamental, que hay que reducir la jornada laboral en España que lleva años congelada”, dijo.
En materia fiscal, el gobernador del Banco de España fue muy claro, asegurando que hace falta hacer una “revisión integral” del sistema fiscal para mejorar la eficacia y eficiencia de la recaudación y el gasto público. En este sentido, su discurso se alineó con el de la OCDE, que publicó la semana pasada su informe económico en el que, igual que De Cos, recomiendan un alza de los impuestos indirectos y de los tributos sobre la contaminación.
Además, dicha reforma deberá hacer una revisión de los beneficios fiscales y una coordinación con los tributos a nivel internacional en gravámenes como el Impuesto de Sociedades. Por otro lado, reiteró la necesidad de aplicar las reglas fiscales impuestas por Bruselas a partir de primavera y que esa disciplina permeabilice en las comunidades autónomas.
De Cos fue claro, y reiteró que una condonación de la deuda a las regiones “tiene el peligro de generar un incentivo perverso” al no hacerlas responsables de sus decisiones de endeudamiento. Al mismo tiempo, aseveró que el actual sistema de financiación autonómico “no es el adecuado” y por eso llamó a trabajar en su reforma partiendo de la “definición de las necesidades de gasto con algunos criterios objetivos que tengan las comunidades autónomas”, de tal manera que se proporcionen recursos para cubrir esas necesidades de gasto.
Asimismo, y a pesar de haber expuesto las vulnerabilidades a medio y largo plazo de la economía española, en su intervención en sede parlamentaria, De Cos anunció que el organismo que gobierna va a revisar al alza sus proyecciones de crecimiento de la economía española a más del 1,9% para este año en su siguiente informe que saldrá publicado a mediados de junio.
Lo que incentiva esta mejora de las perspectivas es el comportamiento del empleo, que en abril rebasó la línea de los 21 millones de empleados, la estabilidad en las tensiones geopolíticas o la mejora del sector turístico. “Lo que podemos decir es que la economía se estabilizó en un crecimiento a ritmos elevados” y por encima de la media europea.