5 JARDINES PARA DESCONECTAR
Con árboles frondosos, agradables zonas de sombra, rincones mágicos... Estos jardines invitan a vivir el verano al aire libre
Estos 5 jardines, frondosos y con rincones mágicos, te invitan a vivir el verano al aire libre. Te damos sus claves.
Romántico y afrancesado
Un jardín que pareciera vivido “La propietaria quería disfrutar de un jardín frondoso desde el primer día, como si este hubiera estado allí antes que la casa. Pusimos especies de hoja perenne, para que el jardín se viera verde todo el año, y jugamos con los diferentes tonos de las hojas”, recuerda el paisajista Jaume Vilaseca, de Fresia Jardiners.
Un look vintage Para darle un toque romántico, escogieron un juego de exterior de hierro forjado. De fondo, un seto de eugenias de solo 1 metro de altura da privacidad sin hipotecar las vistas al mar.
Un jardín minimalista para una casa moderna
Una casa abierta al exterior“En verano la vida en esta casa mallorquina de materiales tradicionales y look moderno se traslada fuera. Por eso era importante crear diferentes espacios de relax y disfrute para sacarle el máximo partido”, explica la decoradora Olivia Reina, de LF91. Así, el comedor de verano está instalado en un porche blanco y de obra, resguardado del sol, y con la misma idea se creó una pérgola con una cubierta de cañizo que vemos en la foto de la derecha y que pertenece a la suite. Es un exterior de aspecto silvestre, pero sencillo y minimalista.
Un jardín en evolución “Creamos un parterre a modo de oasis. Lo vestimos con un manto de romero y un almez, que cuando crezca regalará una bonita sombra en verano. Y colocamos tres grandes ánforas con parras para que bordeen las ventanas y les regalen sombra”.
El patio de la buganvilla
Un jardín urbano “Este es mi rincón favorito del jardín”, explica Julieta Planas, propietaria de una casa centenaria a las afueras de Barcelona, mientras prepara un ramo. “Se accede a él por un arco revestido por esta buganvilla en flor, queda un poco recogido y es muy íntimo.
Además, el magnolio nos regala una sombra maravillosa, y esa ‘pared’ de viña virgen que ahora está tan verde, en otoño, se tiñe de rojo. Es un rincón mágico”. Pero no es el único: “¿Ves esa puerta azul? Al lado está la fuente, que es originaria de la casa, ¡y aún funciona!”.
Zona de sombra, estar y comedor en el jardín
De huerto a salón de verano El jardín de esta antigua casa fue reorganizado por la decoradora Marta Miquel en dos zonas. Por un lado, diseñó una zona de estar donde estaba el antiguo huerto, con una pequeña piscina con vocación de alberca. Por otro, se dispuso un comedor al aire libre.
A la sombra de la glicina “Para sacar el máximo partido al porche, cubrí la gran pérgola con una glicina de vistosas flores liláceas que, además, da una sombra muy agradable en verano”, apunta Marta. El mobiliario es de fibras y madera y da un look campestre muy en sintonía con el paisaje.
Un comedor arropado por el verde El comedor, con un banco en ‘L’ arrimado al muro de contención, se beneficia en verano de la sombra de un gran tilo. Cipreses, jazmín, olivos, limoneros... El jardín es típicamente mediterráneo y con un aspecto asilvestrado que le da mucho encanto.
Encanto mediterráneo
Vida al aire libre Una agradable zona de desayuno a la sombra de un limonero, un salón de invierno cerrado con puertas acristaladas, un rincón de relax junto la piscina bajo un gran algarrobo... En esta antigua granja mallorquina, la vida discurre alrededor de su espectacular jardín.
Un oasis en el campo La decoradora Paula Rombys, responsable de la reforma y paisajismo de esta finca, transformó esos antiguos pastos de ganado en un oasis de aromas y color: olivos, rosales, plantas aromáticas, jazmín, buganvillas... La esencia mediterránea hecha jardín.