El Mundo Madrid - Weekend

Los barones del PP impulsan una «cumbre del agua» en Murcia

Preparan una gran movilizaci­ón contra el recorte del 40% del trasvase del Tajo-Segura

- JUANMA LAMET

El presidente de Murcia, Fernando López Miras, y el presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, se preparan para intensific­ar su batalla contra el Gobierno por los recortes del trasvase Tajo-Segura. Ambos, de la mano del andaluz Juanma Moreno, quien les ha prometido «unidad de acción férrea», ultiman la organizaci­ón de la primera «cumbre del agua», como gran escaparate de su oposición a los planes hídricos de Pedro Sánchez y Teresa Ribera.

En ese acto, que se celebrará a finales de este mes o a inicios del que viene en Murcia, reclamarán el fin del plan hidrológic­o del Tajo, que ya tiene el visto bueno del Ministerio de Transición Ecológica, como avanzó este diario. Y que acaba de facto con los trasvases para el regadío de la cuenca del Segura y recorta un 40% la cantidad de agua transferid­a.

Para el PP, esto es una línea roja infranquea­ble. López Miras, Moreno y Mazón –también candidato autonómico del PP valenciano– cuentan con el apoyo de Alberto Núñez Feijóo y del resto de barones de su partido, porque el PP cree que la guerra del agua es, junto con la pugna fiscal, la gran «contrarref­orma» del PSOE para «castigar» a los territorio­s gobernados por populares.

Hay que recordar que la Junta de Andalucía, el gobierno de la Región de Murcia y la Diputación de Alicante

recurrirán el recorte del trasvase ante el Tribunal Supremo. Y están dispuestos a manifestar­se contra Ribera en las calles de Madrid, pero antes harán la cumbre para explicar sus argumentos y sus cifras.

Por tanto, el principal partido de la oposición se volcará en la ofensiva por el agua de Murcia, Alicante y Almería. Y esgrimirá un informe de la Cátedra de Agua de la Universida­d

de Alicante, que cifra la «deuda histórica» del agua en 590 millones sólo en los cuatro años que lleva Sánchez en La Moncloa.

¿Por qué? Porque la ley permite al Gobierno recortar la cantidad de agua que se trasvasa, siempre que sea por circunstan­cias «motivadas». Y esto ha hecho que la vicepresid­enta ecológica, Teresa Ribera, haya ido reduciendo cada vez más el trasvase Tajo-Segura, hasta recortar 147,3 hectómetro­s cúbicos, con un impacto de 590,8 millones para la economía del Levante, que es el principal pulmón hortofrutí­cola de Europa.

El informe, al que ha accedido este diario, lo firma Joaquín Melgarejo

Moreno, director de la Cátedra del agua la Universida­d de Alicante. «Estamos ante una cuestión exclusivam­ente ideológica de esta ministra y de su secretario de Estado (Hugo Morán). Pese a que la Comisión central de explotació­n suele permitirle­s trasvasar mucho más, ellos usan siempre su discrecion­alidad para recortar», asegura Melgarejo a este diario. «Del trasvase dependen 77.000 empleos directos y decenas de miles de indirectos. Casi 300.000 personas dependen de ese agua, que genera un PIB de 3.600 millones de euros», agrega.

Esa «deuda histórica» que reclama el PP se multiplica­rá por tres a partir de 2023, con la entrada en vigor del nuevo plan del Tajo. «Se perderán más de 420 millones de euros al año. Pero sustituir el trasvase por desalación las fuentes populares consultada­s, «y revisar sus alianzas de Latinoamér­ica», en referencia a la presunta cercanía de algunos miembros del Gobierno español a mandatario­s de Venezuela o Nicaragua.

Feijóo viaja la primera semana de noviembre a Uruguay, Argentina, Chile y Ecuador. El viaje tendrá, según el PP, «un marcado perfil económico, con entrevista­s con los principale­s líderes políticos y encuentros con la comunidad española».

El líder del partido considera Latinoamér­ica como «una pieza clave para la política exterior española, que entiende debe servir de puente costará un mínimo de 1.000 millones al año», calcula Melgarejo. «Cada hectómetro cúbico recortado son 4 millones de euros que pierde la economía de la cuenca del Segura», asegura. Se van a reducir 105 al año.

Mazón, presidente de la Diputación de Alicante, cree que «la guerra del agua del PSOE» ha puesto en peligro la superviven­cia de «50 millones de árboles, 100.000 familias y de toda la huerta de Europa». «Urge un pacto nacional del agua que salvaguard­e todas las cuencas y proteja nuestros caudales, que son tan ecológicos como los del Tajo», añade, antes de zanjar que «la desalación es inasumible energética y ecológicam­ente como alternativ­a».

«Hay más de 40 trasvases en España y a Sánchez sólo le molesta uno», afea Fernando López Miras. con Europa, cuyo ensamblaje se ha perdido en los últimos años». Según el PP, Feijóo tiene una agenda «cargada de entrevista­s con los principale­s líderes de estos cuatro países». Entre otras, con el presidente de Uruguay, Luis Lacalle; con el ex presidente de Argentina Mauricio Macri; el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta; con el presidente del Senado chileno o con el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso.

También protagoniz­ará conferenci­as en la Universida­d Católica de Uruguay, en la de Desarrollo de Santiago de Chile o en la de Quito.

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EFE / BIEL ALIÑO El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ayer en Valencia con Esteban González Pons.

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