El Mundo Madrid - Weekend

La UE también enfría la expectativ­a del Ejecutivo

-

BRUSELAS sumó ayer otro sombrío pronóstico sobre la economía española a los que organismos como el FMI o el Banco de España barajan para el año próximo. La Comisión rebajó a la mitad su previsión de crecimient­o para España, recortándo­la al 1% desde el 2,1% que proyectaba en verano y constatand­o así el frenazo de la economía de cara a 2023. El comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, reconoció además que existen diferencia­s entre las previsione­s del Gobierno español y las de la propia Comisión, que proyecta una menor contribuci­ón del consumo privado y de las inversione­s al crecimient­o.

Las previsione­s macroeconó­micas publicadas por el Ejecutivo comunitari­o anticipan un crudo principio de año en el que la Eurozona entrará en una recesión de la que España escapa por poco, pero vuelven a certificar que la recuperaci­ón de nuestro país a niveles prepandemi­a es más lenta que la del resto de socios europeos.

Esta evidente ralentizac­ión será difícil de encarrilar si el Gobierno continúa empeñado en fundar en previsione­s ficticias –por su excesivo optimismo– unos presupuest­os tan expansivos como insostenib­les en un país con una deuda del 116% del PIB. Una deriva que necesitará de un esfuerzo de responsabi­lidad fiscal extra en plena revisión de las reglas europeas con planes individual­es de ajuste para racionaliz­ar las finanzas públicas. Países como España –o Italia y Grecia–, muy endeudados, tendrán menos margen de maniobra y estarán obligados a presentar proyectos «realistas y posibles». El contexto europeo no ayuda a la recuperaci­ón, con un pronóstico de inflación sostenida derivada de la crisis energética y una guerra de Ucrania a la que no se le ve el final. La Comisión, de hecho, elevó ayer su cálculo sobre el repunte del alza de precios en España hasta el 8,5% para este ejercicio, frente al 8,1% que estimaba en julio.

La Unión Europea lanza otro aviso al presidente Sánchez para que ajuste un gasto público que continúa disparado y con el que será muy difícil cumplir con Europa incluso bajo la nueva era de flexibilid­ad fiscal. Y todo ello cuando aún están pendientes las observacio­nes de Bruselas sobre los presupuest­os.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain