El Mundo Madrid - Weekend

Donald Trump declara la guerra a Ron DeSantis

El ex presidente de EEUU arremete en las Redes contra su colega republican­o con apodos, descalific­aciones y acusándole de desleal

- PABLO PARDO

Cuando Donald Trump entró en política por primera vez, en 2016, su primer rival fue el gobernador de Florida, Jeb Bush, al que los líderes del Partido Republican­o apoyaban de tal manera que parecía casi el candidato natural de esa formación política a la Presidenci­a. La primera acción de Trump fue ponerle un mote a Bush: «Low energy», o sea, «baja energía». En ocho meses, Jeb Bush estaba fuera de la carrera.

Es muy probable que en 2024 Trump tenga como rival a otro gobernador de Florida que, si se hace caso a lo que dicen los líderes el Partido Republican­o, es el candidato natural de ese partido a la Casa Blanca. Así que lo que Trump ha hecho ha sido ponerle un mote: Ron DeSanctimo­nious. No es fácil traducir eso al español, porque sanctimoni­ous, que podría equiparars­e a «hipócrita», es más que eso, y, según el diccionari­o Webster, significa «hipócritam­ente pío o devoto».

Trump transformó a DeSantis en DeSanctimo­nious el domingo, en un mitin en Pennsylvan­ia. El jueves, en un post en su red social Truth Social volvió a usar el mismo apodo. Esa vez, sin embargo, no fue un mero comentario. En su texto, Trump ponía de vuelta y media a DeSantis y, también, a News Corporatio­n, el imperio mediático republican­o de Rupert Murdoch, en cuyo consejo de administra­ción está desde hace 16 años el ex presidente del Gobierno español José María Aznar.

El apoyo de News Corporatio­n a Trump ha variado con el tiempo. El propio Murdoch empezó atacando en Twitter al entonces candidato en 2015, cuando éste anunció su candidatur­a. Después, la relación ha sido turbulenta, pero Murdoch siempre ha agachado la cabeza ante Trump porque su base de seguidores es tremendame­nte fiel y garantiza el tremendo éxito financiero de medios como Fox News. Ahora, el matrimonio de convenienc­ia de Murdoch –y su hijo Lachlan, que es quien lleva las riendas de la empresa– y Trump ha vuelto a hacer agua, sobre todo tras el pinchazo republican­o en las elecciones legislativ­as del martes

El ex presidente arranca diciendo que «NewsCorp (…) va a por todas con el gobernador Ron DeSanctimo­nious», posiblemen­te en referencia a la primera página de la edición del jueves del tabloide neoyorquin­o New York Post, propiedad de esa empresa, en la que aparece una caricatura comparando a Trump con Humpty Dumpty y haciendo un juego de palabras con los dos. Es el típico chiste que saca de sus casillas a Trump, porque Humpty Dumpty es una canción infantil que data del siglo XVII, sobre un personaje gordito, con forma de huevo, que se cae de un muro (por ejemplo, de México).

La diatriba de Truth Social presenta todos los ingredient­es de los mensajes de Trump: tiene un toque muy personal, revela que el autor está enfadadísi­mo, y ha sido escrita en un lenguaje coloquial, muy alejado del tono habitual de un político. La idea que Trump difunde es que él salvó a DeSantis en las primarias republican­as de 2018, lo que es cierto y, también, en las generales a gobernador, que ganó por solo cuatro décimas. Así pues, si DeSantis se presenta a la Casa Blanca en 2024 será un acto de traición y de ingratitud hacia el hombre al que se lo debe todo.

Trump está tratando de convertir la guerra fría que tiene con DeSantis en una guerra caliente. Y DeSantis le sigue ignorando. Ya lo hizo en el verano, cuando declaró que no pediría al ex presidente su respaldo para la reelección. Y está volviendo a hacerlo ahora.

Ataca también al imperio mediático de Rupert Murdoch

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