ROCCO SIFFREDI, ADICTO AL SEXO, DEJA EL PORNO
o que han tenido en común Kim Cattrall, Michael Douglas o Charlie Sheen además de sus profesiones como intérpretes ha sido su adicción al sexo. En algunas ocasiones, su matrimonio peligró. Esta dependencia también la tiene otro intérprete, aunque el tipo de películas sean diferentes. Es el caso de Rocco Siffredi (58), cuyo nombre verdadero es Rocco Antonio Tano, el actor porno masculino más importante de las últimas décadas. El italiano ha confesado en el programa Belve de la Rai2 que deja la industria del cine para adultos. Esta sería la tercera vez que lo dice, anteriormente lo intentó en 2004 y 2009, pero ahora va la vencida. Durante años, Rocco ha sufrido lo indecible porque necesitaba darle placer a su cuerpo continuamente, por lo que llegó a adentrarse en el ámbito de la prostitución
Ldonde tuvo sexo con más de mil personas en un año. Le daba lo mismo si eran mujeres, hombres o transexuales. La adicción era tremenda. Recibió ayuda psicológica, llegó a pensar en castrarse y “le pedí a Dios que me dejara morir porque sentía que no había solución a mi adicción”.
“Intenté dejar el porno en dos ocasiones, en una de ellas, solo duró dos meses. Pero esta es la tercera vez que lo digo y va en serio”, ha declarado el italiano en el programa. El intérprete está casado desde 1993 con la ex actriz porno húngara Rosza Tassi, con quien tiene dos hijos, Lorenzo (27) y Leonardo (23). El primero siempre ha vivido en Budapest, donde se licenció en Económicas y Empresariales, aunque después eligió ser fotógrafo profesional y el segundo ejerce como modelo de ropa interior y en alguna ocasión ha mostrado su interés por ser gigoló, a lo que su padre le respondió que mejor que fuera actor porno porque siempre te acuestas con mujeres guapas, ya que de la otra manera lo tienes que hacer con cualquiera. Nacido en la localidad costera de Ortona (región de los Abruzos, Italia), su infancia estuvo marcada por la muerte de uno de sus hermanos mayores a causa de un ataque epiléptico. Rocco tenía 6 años y Claudio, 12. Sus padres eran muy humildes y habían tenido seis hijos, cinco varones y una mujer. Consciente de que en Ortona no podría satisfacer sus sueños, a los 18 años decidió instalarse en París para trabajar como modelo. En una de sus salidas nocturnas a un club sexual parisino conoció a un actor porno que le proporcionó contactos con varios productores y directores de la industria. Tras su experiencia en el modelaje y en la marina mercante, decidió dedicarse plenamente al cine X en 1987, con más de 1.300 películas.