Cataluña, lista para imitar a los médicos de Madrid
El sindicato profesional dice que «falta una chispa para el conflicto» y el consejero de Salud fía a los fondos de la UE la transformación del sistema
El sindicato Médicos de Cataluña (MC) va a por todas y no descarta seguir la estela de las protestas de Madrid en defensa de la sanidad pública e incluso convocar una huelga médica. Este es uno de los escenarios que la central maneja a corto plazo. «El reloj corre; cada día que pasa, el sistema se degrada más y la situación es insostenible», señaló ayer Xavier Lleonart, secretario general de MC, después de que su organización presentara en el Parlamento autonómico 54.344 firmas en apoyo a la campaña Signasanitat.cat que la central puso en marcha el pasado mes de junio.
En noviembre del año pasado, delegados del sindi- cato entregaron un escrito en el Departamento de Salut en el que denunciaron el incumplimiento de los acuerdos de salida de la huelga de 2018 para mejorar las condiciones asistenciales y laborales del personal facultativo, y manifestaron que el colectivo se sentía «traicionado, menospreciado y explotado» tres años después de las movilizaciones.
En la carta abierta dirigida al entonces consejero de Salud, Josep Maria Argimon, el sindicato ya aseguraba que «el abandono y el desprecio reiterado de la Administración hacia el personal facultativo y el agotamiento físico y emocional que ha supuesto la emergencia sanitaria por el coronavirus, con unas plantillas médicas esqueléticas, ha provocado una epidemia de enfermedad en nuestro estamento».
El sindicato ha recordado a este diario que en el acuerdo para poner fin a la huelga de 2018 se incluyó que los médicos de Familia verían a un máximo de 25-28 pacientes al día y que tendrían 12 minutos de tiempo por visita. Argimon también firmó que se haría un estudio de cargas por especialidades en el Instituto Catalán de la Salud (ICS) para dimensionar las plantillas. Nada de eso se ha llevado a la práctica.
Para evitar una huelga de médicos, Lleonart instó a los grupos parlamentarios y al Govern a que «den una respuesta concreta» a las demandas de la población y a los profesionales, y les alertó de que el malestar y la indignación del personal facultativo es «enorme» y «sólo hace falta una chispa para que estalle una revuelta». También lamentó que en las negociaciones abiertas para renovar los convenios colectivos del ICS y de los centros de la red concertada (SISCAT, primaria, hospitalaria, socio sanitaria y salud mental), «ni la Administración ni las patronales sanitarias muestran ninguna intención de introducir mejoras sustanciales en las condiciones profesionales, laborales y retributivas del personal».
Pese a las diferencias de modelo
1.392E
Gasto por habitante. Esa es la cantidad que Cataluña habrá destinado a la atención de sus ciudadanos este año, una cifra muy similar a la de Madrid, que dedica 1.298 euros por habitante.
85,6
Médicos de Familia por 100.000 habitantes. Según datos del Ministerio de Sanidad, en junio de 2021, Cataluña contaba con esa ratio de profesionales. Es similar a la de Madrid, con 82,6 médicos de Familia.
65%
Provisión de la asistencia concertada. Sólo el 35% de la gestión sanitaria de Cataluña es directa o pública (Instituto Catalán de la Salud) asistencial entre Madrid y Cataluña, lo cierto es que en gasto por habitante y en dotación, por ejemplo, de médicos de Familia, las cifras entre ambas autonomías no difieren tanto.
Según datos de Sanidad, el gasto por habitante en Cataluña en 2021 fue de 1.276 euros y en Madrid, de 1.212 euros. En este año, y a falta de cerrar el ejercicio, Cataluña habrá destinado 1.392 euros por habitante y Madrid 1.298 euros. En cuanto a las ratios de médicos de Familia por 100.000 habitantes, en junio del año pasado, Madrid disponía de 82,6 facultativos y Cataluña de 85,5.
ESTRENO DE BALCELLS
Minutos después de que MC entregara en el Parlamento las firmas, el nuevo consejero de Salud de la Generalitat, Manel Balcells, comparecía por primera vez en la Comisión de Salud para explicar los objetivos de su departamento. Entre ellos, Balcells recuperó la reivindicación de las competencias sobre formación sanitaria especializada (MIR,
EIR y FIR) diciendo, en alusión a la capacidad docente de la comunidad autónoma para hacer frente al déficit de sanitarios, que «hay cosas que dependen de nosotros (plazas de grado) y otras que no (formación especializada); hay que presionar para que dependan».
El llamado MIR catalán, que causó una fuerte polémica en el verano de 2021, forma parte del listado de 56 traspasos pendientes de tratar en la comisión bilateral Generalitat-Estado, creada por el Estatuto de Autonomía en 2006. «Necesitamos más competencias y más soberanía porque tenemos problemas para planificar nuestros especialistas».
Y no quedó ahí Balcells, reclamó competencias en materia de medicamentos; el traspaso a la Generalitat de la titularidad del patrimonio sanitario de la Seguridad Social (SS) en Cataluña (sede del Instituto Catalán de la Salud y varios hospitales y ambulatorios); la condonación de la deuda histórica de algunos centros con la SS por impago de la cuota patronal, y la mejora del mecanismo de compensación por la asistencia sanitaria a pacientes de otras comunidades autónoma. «Gratamente los tratamos, pero hay que tener compensación económica».
Balcells hizo, además, un anuncio, cuando aún no está claro que el Gobierno de la Generalitat logre aprobar dentro de plazo el proyecto de presupuestos para 2023: la consolidación de los ingresos adicionales procedentes del Gobierno central para hacer frente a la pandemia, porque «podríamos entrar en situación crítica si no se consolidan; es lo que ha pasado en Madrid, y así están». En total, serían 1.000 millones de fondos propios que se dedicarán a «consolidar» el incremento de plantilla, mantener el nivel asistencial y afrontar «grandes retos». Al margen, el consejero se ha limitado a enumerar todo lo que a su juicio está pendiente de resolver. En cuanto a las listas de espera, Balcells ha asumido que son «insostenibles».
Balcells pide «más competencias y más soberanía para planificar»