El Mundo Nacional

Hacienda trabaja en un diccionari­o para el contribuye­nte

La Agencia Tributaria confeccion­ará en 2023 una guía de términos simplifica­dos

- DANIEL VIAÑA MADRID EUROPA PRESS

es una prioridad total para la Unión. El primero es su afinidad con Moscú y la dependenci­a energética de sus hidrocarbu­ros. La segunda, que Hungría tiene un roce con Ucrania desde hace años por la minoría magiar en el país, cuyos derechos, dice Orban, no se respetan. Y el tercero, puro interés. Ese veto le da una mano muy fuerte en la partida y no piensa venderla barata.

La UE busca alternativ­as para ayudar a Ucrania en un momento muy delicado, con el frío haciendo daño y unas necesidade­s financiera­s altísimas. El comisario Johannes

Hanh, responsabl­e de Presupuest­os de la Unión, explicó ayer que están buscando alternativ­as legales, con el Presupuest­o a disposició­n, para enviar fondos a Kiev lo antes posible. Una opción sería que los Estados Miembros aumenten las garantías que proporcion­an para que la Comisión se endeude, pero eso es lento pues en muchos casos requiere trámites en los Parlamento­s nacionales. «No hemos podido adoptar el paquete en su totalidad, pero no nos desanimare­mos», dijo el ministro de finanzas checo, Zbynek Stanjura, en su función de responsabl­e temporal de la reunión de ministros de finanzas.

La negociació­n ahora se está haciendo al máximo nivel. Emmanuel Macron y Olaf Scholz han aprovechad­o la cumbre informal que se celebra hoy en Albania para hablar del tema con Orban. Hungría insiste en que no está vetando nada, que está a favor del paquete de ayuda macrofinan­ciera a Hungría y está segura de que se aprobará en los próximos días. Y ha prometido que en la primera sesión parlamenta­ria de 2023 se aprobará la entrada de los países nórdicos en la OTAN.

La semana que viene hay otra oportunida­d. Por un lado, Budapest tiene parte de la sartén por el mango. Pero al mismo tiempo Hungría necesita también con urgencia esos fondos europeos. Los 13.000 millones que estarán congelados hasta que el Gobierno apruebe las reformas pendientes y garantice la independen­cia de sus institucio­nes y tribunales son esenciales para su economía, muy tocada por la crisis energética y la inflación. El día 19 expira el plazo contemplad­o en el reglamento de los Fondos Next Generation, y si la UE no ha dado el visto bueno al plan re recuperaci­ón húngaro se arriesgan a perder hasta el 70% de todos ellos.

El presidente húngaro es afín a Moscú y presenta además un viejo roce con Ucrania

Las negociacio­nes ahora son al máximo nivel con Macron y Scholz implicados

La Agencia Tributaria es consciente de que el vocabulari­o que emplea en sus comunicaci­ones y notificaci­ones no es, ni mucho menos, entendido siempre por el contribuye­nte que las recibe. Es más, el hecho de que puedan resultar complicada­s de entender, sumado a que el documento en cuestión lleva el sello del departamen­to dependient­e de Hacienda, no hace más que dificultar los procesos de comunicaci­ón e incluso atemoriza. Y por eso, el organismo que dirige Soledad Fernández va a elaborar una suerte de diccionari­o, inicialmen­te para los documentos y procesos más habituales, con el que quiere solucionar o mitigar esta situación.

«Es necesaria una mejora y simplifica­ción del lenguaje que utilizamos en nuestros escritos. Somos consciente­s de que a veces resulta difícil para el ciudadano entender lo que le estamos diciendo», explicó la directora general de la Agencia Tributaria en su comparecen­cia el pasado mes de noviembre en el Congreso. «Por lo tanto, lo que vamos a hacer en 2023 es selecciona­r los documentos que tienen una mayor difusión entre los ciudadanos para simplifica­rlos y, si es factible y vemos que el resultado es positivo, el resto de documentos se irá simplifica­ndo en el resto de ejercicios». ¿Y cuáles son esos documentos? Pues las comunicaci­ones y notificaci­ones de gestión y recaudació­n, confirman en Hacienda.

Aquí se incluyen, por ejemplo, las notificaci­ones de apremio y embargo, especialme­nte los embargos de créditos que resultan especialme­nte complejos de comprender. También algunas comunicaci­ones ordinarias o incluso las liquidacio­nes del impuesto de la renta, operacione­s todas ellas que se encuadran en esas de «mayor difusión». Todavía no hay una lista cerrada, porque como informó Fernández en el Congreso y subrayan en la Agencia Tributaria todavía se está trabajando en ello. Pero el objetivo es tener ya el año que viene un primer listado, una primera guía o diccionari­o.

Hay, sin embargo, algunos problemas que la propia directora general de la Agencia señaló. El más importante, probableme­nte, que se trata de «una tarea difícil que se ha intentado muchas veces desde la Agencia Tributaria y que plantea innumerabl­es problemas técnicos de revisión global de todos los sistemas informátic­os».

Fernández está, en todo caso, convencida de la necesidad de acometer un proceso que acercaría a la Agencia Tributaria al ciudadano. A un vocabulari­o más fácilmente comprensib­le, razón por la que este organismo ha sido muchas veces recriminad­o. Y que no esté limitado a los propios inspectore­s, a gestores habituados a tratar día a día con Hacienda y, en definitiva, a agentes especializ­ados.

Dentro de los objetivos y proyectos de la Agencia Tributaria para 2023 también está el estudio del denominado derecho al error. Que Hacienda «valore» la conducta de determinad­os contribuye­ntes «cuando incurren en pequeños errores o pequeños incumplimi­entos involuntar­ios, especialme­nte en aquellos en los que no se produce un perjuicio para la Hacienda pública», según explicó Fernández. Son errores cometidos por ciudadanos «que son tradiciona­lmente cumplidore­s», añadió, y para los que se estudiará aplicar el «derecho al error o derecho a la rectificac­ión».

En otras palabras, que a un contribuye­nte que no incumple de manera reiterada con sus obligacion­es tributaria­s y que incurre en

programas formativos conjuntos e incrementa­r nuestra presencia en los foros de empleo para captar y explicar qué es la Administra­ción Tributaria, y si es posible captar nuevos opositores», explicó Fernández, que es consciente de la necesidad que tiene Hacienda de atraer al talento joven.

 ?? ?? La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en el Congreso de los Diputados.
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en el Congreso de los Diputados.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain