El Mundo Primera Edición - Weekend
Zapatero y Felipe González, las dos Españas sin salir de Ferraz
ALBERTO González Amador, pareja de Isabel Díaz Ayuso, vuelve a las portadas. No es mal momento para recordar que la acusación de fraude fiscal al novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid coincidió en los medios de comunicación con la acusación de fraude fiscal y petición de más de cuatro años de prisión al entrenador del Madrid, Carlo Ancelotti. Mientras Alberto González, quien no ocupa ningún cargo público, no sale de los debates parlamentarios, Ancelotti no sólo no se cuela en ninguno, sino que difícilmente el entrenador del Madrid no ganaría de calle unas elecciones a la Presidencia de la Comunidad. Alberto González trató de abandonar los juzgados con una peluca gris, quizá pensando que la prensa le dejaría en paz al confundirle con Ancelotti.
Fraga se fueron a Barreiro, un lugar, que no un pueblo, de 50 habitantes, y enterraron la primera traviesa. Si los israelíes supieran lo que tardamos en poner trenes a Galicia no se habrían escandalizado tanto al escuchar a Yolanda Díaz decir que «Palestina será libre desde el río hasta el mar».
Hasta Barreiro se fue hace un par de años Pablo González, de a hablar con Perfecto, un señor de 73 años, que ya es todo lo que queda de cuando estuvo «Fraga enterrando cosas». También el túnel de Verdía, «que no sé por qué le pusieron ese nombre porque Verdía queda más para allá», apunta Perfecto. Los abuelos son el mayor impedimento para que llamemos a las cosas como nos dé la gana en vez de como son.
Lo recordé más tarde viendo a Felipe González llevarse una Constitución a
que es donde un político va a divertirse a costa de que otro no se divierta. Zapatero y González representan a las dos Españas sin salir del Partido Socialista, lo que refuerza la idea de Pedro Sánchez de que él es España.