CONSECUENCIAS EN EL CÁUCASO DE LA DEBILIDAD RUSA
En los primeros días de la invasión de Ucrania, Vladimir Putin tuvo sobre la mesa un principio de acuerdo con Kiev para parar la guerra. Pero lo apartó de un manotazo ante la expectativa de quedarse con partes del país.
La agencia Reuters reveló que el enviado principal de Putin en Ucrania le dijo al líder ruso cuando comenzó la guerra que había llegado a un acuerdo provisional con Kiev. El trato satisfacía la obsesión de Rusia de que Ucrania se mantu
Los disparos tronaron ayer de nuevo en la frontera entre Armenia y Azerbaiyán, que siguen sin cerrar heridas de décadas. El Ministerio de Defensa armenio acusó ayer a su vecino de atacar con «artillería, fuego de mortero y rifles de gran calibre» Verin Shorja, Vayots Dzor o Jermuk, a viera fuera de la OTAN. Según dijeron a la agencia tres personas cercanas al Kremlin, Putin rechazó la oferta y siguió adelante con su campaña militar.
Ruso nacido en Ucrania, Dimitri Kozak ha sido el hombre del presidente para manejar los hilos en Ucrania. Estaba en una buena posición para negociar un acuerdo de paz porque desde 2020 Putin le había encomendado la tarea de llevar a cabo conversaciones con sus homólogos ucranianos sobre la región del Donbás.
Tras sus gestiones con la parte ucraniana, Kozak le dijo a Putin que creía que el acuerdo que había logrado eliminaba la necesidad de que Rusia siguiera impulsando una 12 km de la divisoria. El martes, armenios y azerbaiyanos se acusaron mutuamente de haber violado la frágil tregua que concluyó la guerra de 44 días desatada a finales de 2020. Ereván, que ha perdido 105 soldados, culpó a Azerbaiyán de haber desatado las escaramuzas lanzando un «bombardeo intenso», con artillería y drones armados, contra su territorio, e incluso de haber ocupado parte de él. Armenia considera que Azerbaiyán está aprovechando el momento de debilidad ruso amplia ocupación de Ucrania. El Kremlin ha negado esta versión de los hechos.
Putin había afirmado repetidamente antes de la guerra que la OTAN y su infraestructura militar se estaban acercando a las fronteras de Rusia al aceptar nuevos miembros de Europa del Este. Aseguraba que la alianza ahora se estaba preparando para traer a Ucrania también a su órbita. Según el planteamiento de Putin eso representaba una amenaza existencial para Rusia: le estaban obligando a reaccionar.
Anteriormente había respaldado las negociaciones. Pero cuando tuvo el preacuerdo delante Putin le dejó claro a Kozak que las concepara inclinar a su favor la mesa de negociación que auspicia Bruselas. Para Bakú, que ha declarado la muerte de medio centenar de combatientes, el episodio del martes lo originó un «sabotaje» y una «provocación a gran escala» contra áreas fronterizas de su territorio por elementos armenios, a los cuales acusó de haber minado zonas bajo su soberanía. La violencia hizo saltar las alarmas: Borrell urgió a la calma y se ofreció para mediar. / LLUÍS M. HURTADO siones negociadas no iban lo suficientemente lejos. Y que había ampliado sus objetivos para incluir la anexión de franjas de territorio ucraniano: así lo relatan tres fuentes a la agencia. Como resultado se abandonó el trato. Incluso si Putin hubiera accedido al plan de Kozak, no está claro si la guerra podría haber terminado.
Cuando se le preguntó sobre los hallazgos de Reuters, el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, dijo: «Eso no tiene absolutamente ninguna relación con la realidad. Nunca sucedió tal cosa. Es información absolutamente incorrecta». Kozak no respondió a las solicitudes de comentarios enviadas por los medios.
Tampoco la parte ucraniana contribuyó a aclarar el asunto. Mijailo Podolyak, asesor del presidente ucraniano, dijo que Rusia usó las negociaciones como una cortina de humo para prepararse para la invasión, pero no respondió a las preguntas sobre el contenido de las conversaciones ni confirmó si se llegó a un acuerdo preliminar. «Hoy sabemos claramente que la parte rusa nunca ha estado interesada en un arreglo pacífico » , ha respondido Podolyak.
Dos de las tres fuentes de Reuters aseguran que hubo un impulso para alcanzar un acuerdo inmediatamente después de la invasión de Rusia el 24 de febrero. En cuestión de días, Kozak vio que tenía el acuerdo de Ucrania con los principales términos que Rusia había estado buscando y le recomendó a Putin que firmara un acuerdo.
« Después del 24 de febrero, a Kozak se le dio carta blanca: le dieron luz verde; consiguió el trato. Y le dijeron que se fuera. Todo fue cancelado. Putin simplemente cambió el plan a medida que avanzaba», dijo una de las fuentes cercanas al líder ruso.
Seis meses después del comienzo de la guerra, Kozak permanece en su puesto como subjefe de gabinete del Kremlin, pero ya no está manejando el tema de Ucrania. Jurista y ex integrante de las fuerzas especiales, Kozak trabajó durante las elecciones presidenciales rusas de 2004 como jefe del equipo de campaña electoral de Putin. De 63 años, ha sido un leal lugarteniente de Putin desde que trabajó con él en la década de 1990 en la oficina del alcalde de San Petersburgo. Pero parece haber pasado a un segundo plano tras prevalecer el enfoque militar.
«A Kozak le dieron luz verde. Putin cambió el plan», dice una de las fuentes
El inquilino del Kremlin rechazó la paz para lanzarse a la toma de territorios
La agencia detalla que respecto a la existencia del acuerdo, hay una tercera fuente que asegura que fue informada sobre los eventos por personas que estaban al tanto de las discusiones entre Kozak y Putin. Esa fuente difiere sobre el momento en el que todo sucede. Asegura que Kozak le había propuesto el trato a Putin y lo había rechazado justo antes de la invasión. Todas las fuentes de esta exclusiva solicitaron el anonimato por compartir información interna confidencial.