Carreño: “Lo que hay que hacer es vacunarse y si no, pues no venir”
Novak Djokovic, ayer en Melbourne, durante un descanso en su jornada de entrenamiento.
La decisión se hizo esperar, pero Alex Hawke, el ministro de Inmigración australiano, ejerció finalmente ayer la autoridad que le otorga su cargo y volvió a cancelar el visado de Novak Djokovic, que tiene la intención de defender el título de campeón del Abierto de Australia que arranca en Melbourne el próximo lunes y que le presenta a él como principal reclamo. El número uno del tenis mundial tenía previsto comparecer este sábado por la mañana (a las 8.00 hora australiana) de nuevo ante el juez como paso previo a otra detención a la espera de una resolución definitiva. El jugador y sus abogados explicarán sus argumentos en una nueva vista judicial que se celebrará mañana domingo. Justo un día antes de la fecha prevista para su debut en el torneo australiano.
El serbio, de 34 años, a quien las Fuerzas Fronterizas ya le invalidaron el visado el miércoles de la semana pasada a su llegada al aeropuerto de Tullamarine, había quedado en libertad este lunes, después permanecer cinco días aislado en un hotel de cuarentena y de que el juez Anthony Kelly anulara la primera orden de detención. Los agentes le retuvieron al desembarcar por considerar irregular la exención médica que, sobre el papel, debía permitirle sortear los 14 días de cuarentena obligatorios impuestos por Australia a cualquier visitante no vacunado. El argumento central del número uno del mundo fue haberse contagiado por covid en los seis meses anteriores —en su caso, afirmó haber dado positivo el 17 de diciembre—, una razón que Inmigración considera no apta. Desde su puesta en libertad, Hawke ha estado evaluando cuál era el siguiente paso, y este llegó ayer.
“He ejercido mi autoridad adscrita a la sección 133C(3) del Acta de Inmigración para cancelar la visa a Novak Djokovic, por motivos de salud y buen orden, basándome en el interés público”, declaró Hawke en un comunicado. “Antes de tomar esta decisión examiné cuidadosamente la información que me proporcionaron el Departamento del Interior, la Fuerza Fronteriza Australiana y el señor Djokovic”, prosigue el ministro, antes de finalizar: “El Gobierno de Scott Morrison está firmemente comprometido a proteger las fronteras de Australia, especialmente en relación con la pandemia covid-19”.
Al margen de retar frontalmente a una administración que trata de convencer a toda su ciudadanía de la necesidad de vacunarse, el tenista cometió una irregularidad en su declaración de entrada en Australia, al responder “no” a la pregunta de si había viajado en los 14 días anteriores a su llegada a Melbourne, la noche del miércoles 5 de enero. Según el rastro dejado en sus redes
Las reacciones sobre el caso de Djokovic se siguen sucediendo en todo el mundo y también dentro del circuito tenístico. El español Pablo Carreño, número 21 del mundo, fue uno de los más contundentes en su análisis de la situación. “Lo que hay que hacer es vacunarse y si no lo estás, pues no venir”, resumió. “Estos líos no son buenos para el tenis”, señaló Carreño, que debuta este lunes en Australia
ante el argentino Tomás Martín Etcheverry.
Carreño también habló sobre las condiciones en las que se disputó la pasada edición del torneo. “Fueron inaceptables. Hicieron un gran esfuerzo por sacar el torneo adelante pese a la covid, pero no se realizó en unas circunstancias óptimas. Los 15 días de cuarentena en los que nos tuvieron encerrados en el hotel fueron malos y difíciles para entrenar. Al final hubo muchas lesiones”, relató Carreño.
El británico Andy Murray también se pronunció sobre Djokovic. “Da la sensación de que esto se ha alargado demasiado tiempo y eso no es bueno ni para el tenis, ni para el
Open de Australia, ni para Novak. Animo a todos a que se vacunen. Cada uno debe tomar su propia decisión, pero en un país como Australia, necesitas estar vacunado para poder entrar y jugar. Cada uno que haga lo que crea, pero hay consecuencias por las decisiones tomadas”, cerró Murray.