Alemania adelanta a 2030 el abandono del carbón como energía
La coalición acuerda aumentar las renovables del 65% previsto al 80%
El futuro Gobierno alemán se comprometió ayer a llevar al país a un futuro libre de carbón en la producción de energía, una meta que debe alcanzarse “idealmente” a más tardar en 2030, gracias a la expansión masiva de las energías renovables
—hasta el 80%, en lugar del 65% para 2030— y a la construcción de modernas centrales eléctricas de gas como tecnología puente. El acuerdo de coalición publicado ayer es muy claro: no se volverá a la energía nuclear. El objetivo es la “neutralidad climática” para 2045.
“El mundo está en transición en el comienzo de una década, por lo que no podemos quedarnos parados. La crisis climática pone en peligro nuestros medios de vida y amenaza la libertad, la prosperidad y la seguridad”, señala el documento. “Los nuevos modelos de negocio y las tecnologías pueden crear una prosperidad neutra para el clima y buenos empleos”, añade el texto.
El nuevo Gobierno, que estará encabezado por el socialdemócrata Olaf Scholz, quiere pasar de la “economía social de mercado” que hizo posible la prosperidad económica del país, tras el colapso de la Segunda Guerra Mundial, a la “economía social-ecológica de mercado”.
El tripartito asegura que en 2022 habrá un programa de protección climática de emergencia.
Cada proyecto legislativo deberá someterse a un “control climático”, es decir, se comprobará si cumple con los objetivos climáticos. La energía solar será obligatoria en los tejados de los nuevos edificios comerciales, y se convertirá en “la norma” para los nuevos edificios privados. Además, los Estados federados deberán destinar el 2% de su territorio a la energía eólica.
El fin de los motores de combustión, tal y como se acordó en la UE, se mantiene: 2035, y no 2030, como habían exigido Los Verdes. Tampoco habrá límite de velocidad general en las autopistas. Los socialdemócratas del SPD, Los Verdes y los liberales del FDP también quieren impulsar una tasa de aviación a escala europea. Además, el documento recoge que los billetes de avión no se
vendan a un precio inferior al de los impuestos, tasas y cánones, pero la tasa de tráfico aéreo no se incrementará hasta 2023.
“El nuevo Gobierno hará de la expansión de las energías renovables un proyecto central. Alinearemos nuestras políticas climáticas, energéticas y económicas a escala nacional, europeo e internacional”, señala el documento. “Para lograrlo, derivaremos ambiciosamente nuestros objetivos de la contribución conjunta a la que se ha comprometido la UE en el marco del Acuerdo de París”.
El tripartito acordó también asegurar un precio mínimo (60 euros la tonelada) de las emisiones de CO2 para incentivar la salida de los combustibles fósiles lo antes posible y el aumento de la inversión para proyectos relacionados con el hidrógeno verde.