Black Friday, más compras por temor al desabastecimiento
El comercio confía en recuperar el terreno perdido
La mejora de la situación económica y la relajación de las restricciones tras más de un año y medio de pandemia han alimentado la fiebre por el Black Friday, que es oficialmente mañana aunque ya existen multitud de ofertas por adelantado. Las empresas esperan que la citasuponga el inicio de las compras navideñas gracias a unos descuentos agresivos, rompa su techo de ventas con la vuelta en masa a las tiendas físicas. Los consumidores que este año se interesan por esta jornada de compras son alrededor de un 65%, 21 puntos porcentuales por encima de 2020, según el informe Future Consumer Index de la consultora EY.
Pese a este interés, el próximo Viernes Negro no ofrecerá unas rebajas tan suculentas como años anteriores, según los analistas consultados del sector comercial. Esto se debe al recibo de la luz disparado y a la subida en el coste de transportes de mercancías. Pero esto no supondrá un freno a las ventas: el temor a que exista desabastecimiento de algunos artículos en unas semanas anima a los consumidores a aprovechar estas ofertas más que antaño y adelantar buena parte de sus compras de Navidad. El último estudio de consumo realizado por Deloitte recoge que la campaña concentrará un 15% de las compras previstas para las fiestas.
El ahorro acumulado en las carteras de las familias también eleva la ilusión ante la posibilidad de comprar a bajos precios. “Los comercios físicos volverán a acoger el Black Friday y las perspectivas de salida de la pandemia son, a pesar de las recientes noticias, un poco más claras. Todo ello contribuirá a que se viva una mayor expansión del consumo en este periodo de rebajas”, señala el profesor de Economía, Finanzas y Contabilidad de Esade, Pedro Rey, en un comunicado. En estudios como el de Idealo apuntan a que hasta un 45,8% de los españoles comprará parte de sus regalos de Navidad durante el Viernes Negro. El recibo de compra también crecerá, hasta alcanzar una media de 271 euros por persona durante toda la campaña.
En este contexto, tras meses con la actividad económica hibernada, ahora las empresas se enfrentan a un reto mayúsculo: la demanda disparada resulta inasumible y tensiona la cadena de suministro hasta el punto de provocar falta de abastecimiento en muchos sectores. En esto influye la escasez de chips, semiconductores y otras materias primas, además de la congestión en los puertos que generan problemas de almacenamiento y retrasos en las entregas en todo el mundo. Por ejemplo, algunas empresas en la industria juguetera no saben si tendrán a tiempo sus productos para la campaña navideña.
Un estudio calcula que el gasto medio será de 271 euros en la campaña navideña
La elevada demanda de productos tensiona la cadena de suministro
Transy Rodriguez, responsable del sector de productos de consumo y distribución de EY, alerta de que la escasez de componentes en el mercado marcará sobre todo la electrónica y la informática. “La situación será llamativa al haberse reducido el stock de producto y, por consecuencia, la necesidad de ser más agresivos en los descuentos. Por eso, es probable que se produzcan importantes retrasos en las entregas y que las mejores promociones no coincidan con los últimos lanzamientos en el mercado”, apunta.
Otro de los cambios para este año es el de la elección del lugar de compra. Según el estudio de Idealo.es, el año pasado el 73% de los consumidores realizaron sus compras por internet por miedo a la pandemia. En cambio, la encuesta elaborada por el comparador en 2021 revela que casi la mitad de los españoles tiene pensando comprar tanto en internet como en tiendas físicas durante este Black Friday. De hecho, solo el 39% ha señalado que lo hará exclusivamente por internet, 34 puntos porcentuales menos que el año anterior.
En la misma línea, Deloitte anota que el canal físico lidera la intención de gasto en Navidad (64%). En concreto, las opciones preferidas para hacer las compras navideñas son las tiendas locales y los grandes almacenes. “El consumidor tiene ganas de salir y gastar fuera de casa, perdiendo el miedo a acudir a lugares públicos con el fin de las restricciones de aforos y movilidad”, recalca la consultora en su informe de consumo navideño. Después de meses difíciles, parece que ahora sí los consumidores desean volver a la calle y volver a comprar.