Foco de contagio de la peste porcina africana
“Si la peste porcina africana (PPA) llegara a España, sería dramático porque somos una potencia mundial”, aclara Jaume Bernis, responsable del sector porcino de la Coordinadora de Organizaciones de de los accidentes de tráfico causados por animales Com. Valenciana
Murcia Baleares 0 Agricultores y Ganaderos (COAG). La enfermedad se ha propagado a siete países de la UE. “El último foco se produjo en Bélgica y los datos apuntan a que se debe en un 90% a los jabalíes”. Advierte a los cazadores de que en caso de localizar un ejemplar muerto avisen al Seprona, por si estuviera infectado. La Comisión Europea vetó el movimiento de jabalíes vivos entre países para prevenir la extensión de la peste. cazadores en función de sus intereses”, advierte.
En su opinión, el esfuerzo cinegético causa el efecto contrario al buscado y redunda en la proliferación de jabalíes, porque se acaba principalmente con adultos y machos, mientras que la población fértil de hembras y la juvenil se mantiene. “Además, se siguen soltando jabalíes de granja para que los cazadores tengan más piezas. No sé si eso es luchar contra la supuesta sobrepoblación”, añade. Hernández culpa del conflicto que se está produciendo a la invasión del hábitat del jabalí, tanto por la expansión de los cultivos como de los desarrollos urbanísticos. “Se obliga al jabalí a invadir zonas humanizadas”, sostiene.
Una situación que se reproduce desde hace años en la zona noroeste de la Comunidad de Madrid. Varios pueblos (Las Rozas, Torrelodones o Majadahonda) se han unido para reclamar al Ejecutivo autonómico que les ayude. Un portavoz de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio explica que “en terreno urbano la competencia recae en los Ayuntamientos”. Aunque para cazarlos o capturarlos deben pedir permiso a la consejería. Hasta octubre, el Ejecutivo madrileño ha concedido 286 permisos. Javier Gavela, veterinario del Ayuntamiento de Las Rozas, pueblo pionero en comenzar a aplicar medidas en 2004, pide un plan global “porque no es un tema local”.
En Cataluña, el Departamento de Agricultura ha comprobado la existencia de una población nacida en condiciones urbanas o periurbanas, y que no se asusta de la presencia de personas o coches. Estos se alimentan de residuos que encuentran en la basura o que se les ofrece y descansan en rincones ajardinados o solares abandonados. Los ejemplares capturados en zonas periurbanas, aunque jóvenes, tienen un peso que les permite comportarse como adultos, y por tanto criar antes de tiempo. En cambio, los cazados en el bosque suelen ser ejemplares con un peso inferior.
Mientras se encuentra la solución, los municipios advierten de que no se dejen basuras a su alcance o se cierren las puertas de las vallas cinegéticas, que les impiden llegar a lugares habitados.